
El Producto Interior Bruto (PIB) de EEUU registró un incremento del 2,3% anualizado en el segundo trimestre de 2015, según la primera estimación publicada hoy por el Departamento de Comercio. La lectura ha quedado por debajo de lo previsto: de media, los expertos consultados por Bloomberg esperaban un incremento del 2,5%.
El Gobierno estadounidense ha anunciado también un mejor arranque de año, que se ha reflejado en una revisión al alza del dato del primer trimestre, que pasa de marcar una contracción del 0,2% a un avance del 0,6%.
El primer cálculo sobre el comportamiento del PIB muestra una aceleración mayor de lo previsto en el gasto de los consumidores, que equivale a más de dos tercios de la actividad económica del país, y que en el segundo trimestre creció un 2,9%, cifra superior al incremento del 1,8% registrado en los tres primeros meses del año.
La inversión empresarial cayó el 0,6%, mientras que los inventarios bajaron a 110.000 millones de dólares desde los 112.800 millones del trimestre anterior. Las exportaciones se anotaron un repunte del 5,3%, frente al descenso del 6% del primes trimestre, mientras que las importaciones aumentaron un 3,5%.
El Departamento de Comercio hace hincapié en que el avance del dato del segundo trimestre está basado en una recopilación incompleta de datos y será revisado en las próximos semanas. La segunda estimación se publicará el 27 de agosto.
Al término de su reunión mensual, la Reserva Federal (Fed) estadounidense confirmó ayer que la economía estadounidense sigue acelerando y que el empleo mejora progresivamente. Toda la información que maneja la Fed apunta a una mejora de la situación económica y de las expectativas de empresas y familias. Es el caso del gasto de los hogares, que ha crecido, mientras que el empleo ha registrado avances que la Fed califica como "sólidos".