
Hace pocos meses, Fátima Báñez, ministra de Empleo, presumía de que la desigualdad económica en España había caído después de cinco años subiendo: "El coeficiente de Gini de desigualdad desciende por primera vez en 2013 tras cinco años de incremento". Poco ha durado la alegría, la agencia de estadística Eurostat ha publicado recientemente los últimos datos sobre desigualdad de algunos países. España es, por el momento, el país con mayor desigualdad de Europa de renta disponible, superando en 2014 a Grecia y Letonia, que se encontraban por delante en años anteriores.
Según el indicador de Eurostat 'income quintile ratio' que mide la diferencia de renta disponible entre el 20% de la población más 'pobre' del país y el 20% más rico, España es el país más desigual con un ratio de 6,8. Grecia y Letonia han obtenido un ratio del 6,5. Otros países que ya han sido analizados muestras desigualdades menores, por ejemplo Finlandia con un 3,6, Austria con un 4,1 o Hungría con un 4,2. La media de la Eurozona en 2013 (último dato disponible) fue de 5,0.
España consiguió reducir la desigualdad en este indicador en 2013, donde obtuvo un ratio de 6,3, logrando reducir así el 6,5 obtenido en 2012. Pero en 2014 el crecimiento de la desigualdad ha sido muy elevado, pocos países han presentado crecimientos tan grandes de la desigualdad en la distribución de la renta disponible desde que se lleva trabajando con el 'income quintile share ratio'.
En 2013, último año del que se tienen datos disponibles de todos los países, Noruega fue el menos desigual con un 3,3, seguido de Islandia con un 3,4. Finlandia, Holanda o Eslovenia presentaron un ratio de 3,6. Serbia fue en 2013 el país con más diferencia obteniendo un 8,6.
Coeficiente de Gini
El coeficiente de Gini es otro indicador que se encarga de medir la concentración del ingreso entre los individuos. Toma los valores entre 0 y 100. El cero indica que todos los individuos del país o región tienen el mismo nivel de ingresos, mientras que el 100 indica que un sólo individuo acapara todos los ingresos. Por lo tanto, cuanto más alto sea este ratio mayor es la desigualdad de ingresos.
Este indicador también se ha disparado en España en 2014, después de haber caído en 2013 hasta el 33,7 ha subido en 2014 al 34,7, superando así a Grecia (34,5), pero quedando por detrás de Letonia (35,5). De los países analizados hasta el momento, Finlandia muestra también la menor desigualdad de ingresos con un 25,6.
La desigualdad de ingresos y de renta disponible ha crecido de forma generalizada en todos los países de Europa durante la crisis. Parece que España y otras naciones que presentan una mayor tasa de paro se han visto afectadas con mayor intensidad que los Estados cuyo mercado laboral ha podido sortear mejor los estragos de la crisis.