
El Gobierno destinará un total de 28.503,12 millones de euros al pago de prestaciones por desempleo este año, lo que representa un 5,4% menos en comparación con 2011, según consta en el proyecto de Ley de Presupuestos Generales del Estado (PGE) para 2012.
El gasto previsto para las prestaciones será menor, por ejemplo, que la cantidad destinada a pagar los intereses de la deuda, que implicarán un desembolso de 28.848 millones este ejercicio, debido al repunte del coste de refinanciación.
En concreto, el Ejecutivo prevé que en 2012 se destruyan 631.000 empleos, lo que presupone que el año se cerrará con 5,6 millones de parados y una tasa de paro del 24,3%.
No obstante, el pago será menor que en 2011, en parte, porque muchos parados ya han agotado su prestación. Muchos dejarán de percibirla, mientras otros podrán beneficiarse de la ayuda de 400 euros del Plan Prepara, destinada a los parados sin ingresos.
El Ejecutivo explica que el "elevado" gasto en prestaciones por desempleo registrado en los últimos años ha provocado que el Servicio Público de Empleo Estatal (SPEE), organismo que hasta 2007 se autofinanciaba con cuotas de empresarios y trabajadores, "requiera de importantes aportaciones del Estado para su financiación".
La contribución del Estado para 2012 será de 13.306,5 millones de euros, frente a los 15.780,01 millones de euros presupuestados inicialmente para 2011, lo que en términos relativos implica una reducción del 15,6%.
Si a los 28.503,1 millones de euros destinados al pago de prestaciones se suman los gastos de funcionamiento, los créditos totales destinados a la cobertura del desempleo para este año ascienden a 28.805,05 millones de euros, un 5,5% menos.
Del total presupuestado para este año en desempleo, 20.060,4 millones de euros se destinarán al pago de prestaciones contributivas, lo que permitirá dar cobertura a 1,39 millones de desempleados, mientras que 8.442,6 millones de euros se dedicarán al nivel asistencial (subsidio por desempleo, subsidio REASS, renta agraria y renta activa de inserción).
El presupuesto para el pago de prestaciones contributivas se reduce un 4,2% en comparación con el de 2011, en tanto que el destinado a los subsidios desciende un 8,3% respecto al de 2011.
En concreto, dentro del nivel contributivo, para el pago del subsidio por desempleo (incluida la renta agraria) se dedicarán 6.606,7 millones de euros, con una previsión de 1.143.000 beneficiarios.
El subsidio REASS contará con una dotación de 737,88 millones de euros, con una previsión de 140.000 beneficiarios, en tanto que la renta activa de inserción (RAI) dispondrá de 1.098,04 millones en 2012, lo que permitirá atender a 220.000 beneficiarios.