La bolsa española ha cerrado con los ojos puestos en Wall Street. La jornada bursátil ha estado marcada por la ida y venida de rumores en torno a lo que Ben Bernanke, presidente de la Fed, pueda decir sobre el futuro de la política monetaria norteamericana a partir de las 20:00 de la tarde.
Mucho se ha hablado de la fuerte intervención de la Fed en la economía, pero a la luz de los últimos datos macro y de las últimas previsiones, el Congreso de EEUU se pregunta qué más puede hacer la institución que preside Ben Bernanke para asegurar o potenciar la recuperación.
Y parece que el momento de las respuestas ha llegado después de un primer semestre errático que ha transcurrido bajo la amenaza de la crisis de deuda soberana europea.
Entre las opciones de la Fed se encuentra la posibilidad de que Bernanke rebaje los tipos de interés hasta el 0%. Actualmente se encuentran en una horquilla de entre el 0 y el 0,25%, situándose el interés medio de los últimos meses en el 0,16%.
Pero otra medida que podría aplicarse, que es mucho más acertada, contempla la posibilidad de eliminar los intereses a las reservas.
Pase lo que pase, los mercados, y sobre todo los países asiáticos, esperan como agua de mayo que la Fed tome las riendas para reestablecer la confianza en la economía norteamericana.
Si esto se cumple Japón podrá respirar tranquila, ya que achaca el rápido fortalecimiento de su divisa a la desconfianza generada en Europa y EEUU (no en vano, el yen se considera un valor refugio).