Viviane Reding, vicepresidenta de la Comisión Europea, advirtió el jueves que sin un plan de ayuda, la crisis griega puede ser "el inicio de un tsunami" que arrastre a países como Portugal o España, en medio de intensas negociaciones sobre un apoyo a Atenas. El miedo de la UE a provocar la caída del Gobierno alemán complica el rescate de Grecia.
"Grecia puede ser el inicio de un tsunami". "Si un miembro pequeño (de la Eurozona) va mal, se le debe ayudar" porque de lo contrario "tendrá una influencia sobre los otros (miembros) que tampoco van bien, como Portugal, España, Inglaterra, Francia...", previno la comisaria de Justicia en declaraciones a la radio belga Bel-RTL.
Por este motivo, hizo un llamamiento a la jefa del gobierno alemán, Angela Merkel, para que se "muestre valiente" y acepte un plan de apoyo financiero a Grecia que está siendo objeto de intensas negociaciones entre los países miembros de la Eurozona, horas antes del inicio de una cumbre europea en Bruselas.
Alemania rechazó de plano una ayuda puramente europea para Atenas, confrontada a una crisis presupuestaria de proporciones históricas, y promueve ahora un plan que incluya el apoyo del Fondo Monetario Internacional (FMI).