Carlos Alcaraz protagonizó la noticia más positiva en clave deportiva nacional de este fin de semana al ganar su segundo Roland Garros en una final memorable de más de cinco horas contra el italiano Jannik Sinner. Una victoria que le va a reportar un espléndido premio en metálico que no va a pasar desapercibido para Hacienda.
El tenista murciano, que ya acumula cinco Grand Slams, se embolsará nada más y nada menos que 2,55 millones de euros, tal y como recoge la ATP en este comunicado en su página web. Con todo, esta no será la cifra neta que se lleve tras ganar en la tierra batida de París.
El premio de Roland Garros tiene que tributar por el IRPF, el impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas, según ha explicado la plataforma especializada de asesoría fiscal TaxDown.
De acuerdo con los cálculos de TaxDown, Alcaraz tendrá que pagar 1.181.936 euros en concepto de IRPF, sin contar gastos deducibles. O lo que es lo mismo: Hacienda se quedará con el 46% del premio de Roland Garros.
Aitor Fernández, asesor fiscal de TaxDown, explica que esto se debe a la combinación de IRPF estatal y autonómico, ya que existe un tramo para cada uno de ellos, algo que "puede hacer que más del 45% del dinero acabe en manos de Hacienda", tal y como le ha sucedido al tenista.
Así, aunque las cifras siguen siendo muy elevadas, cuando se habla de las cantidades en concepto de premios que reciben los periodistas a lo largo de su vida siempre son reducidas en un porcentaje importante tras la acción recaudadora de Hacienda.
"Cuando hablamos de estas cantidades por triunfos deportivos es habitual pensar solo en la cifra bruta, pero lo verdaderamente relevante es cuánto acaba llegando al bolsillo del deportista", resume Aitor Fernández.