
La firma de moda Desigual redujo un 11,5% la facturación en 2017, hasta 761 millones, y un 33,3% el beneficio, hasta 47 millones, en el que fue el ejercicio central de su plan de reestructuración, iniciado en 2015 con un horizonte de cinco años. La compañía confía en que 2018 sea el año de cambio de tendencia tras dos años de ajustes, con mejoría palpable a partir del segundo semestre.
El director general corporativo, Alberto Ojinaga, atribuye la caída de 2017 en ingresos y beneficios al plan de reducción de la red de tiendas -Desigual ha abierto 11 tiendas y cerrado 64 entre 2016 y 2017- y a la disminución de ventas en establecimientos multimarca, así como al incremento de inversiones en mejorar la calidad del producto y relanzar la marca.
Desigual acabó 2017 con 515 tiendas: 409 propias y 106 franquiciadas. Este año, volverá a incrementar su red con 50 aperturas de un nuevo concepto de establecimiento y la reforma de otras 50 tiendas existentes para adaptarlas al nuevo modelo, ha explicado a elEconomista el director general de cliente y marca, David Meire. La intención es adaptar toda la red para 2020, con una inversión conjunta de 130 millones de euros. También habrá cierres, pero todavía están por concretar.
Ojinaga reivindica la fortaleza de Desigual para encarar su nueva etapa de crecimiento, con una posición neta de caja de 452 millones a cierre de 2017, lo que supone 71 millones más que un año antes. Este 2018, la empresa de moda también seguirá invirtiendo en calidad de producto y refuerzo de la marca, por lo que "no necesariamente en el conjunto del año habrá crecimiento", según el director general corporativo: "Estamos mirando a largo plazo, tenemos una situación financiera muy sólida, y miramos a 2020".
Avance internacional
Europa supone el 90% del negocio de Desigual, pero la firma quiere crecer más allá, especialmente en Latinoamérica, donde en 2017 creció un 18%. Allí, el país estrella será México, donde cuenta con un socio local que actualmente tiene 12 franquicias y con el que prevén acometer "un plan ambicioso de expansión hasta 2020", según Meire. Latinoamérica, junto a Norteamérica, tienen hoy por hoy un peso del 5% en los ingresos.
También aspira a ganar peso en el área de Asia Pacífico –que actualmente aporta otro 5% de la facturación-, con Japón en cabeza, que ya cuenta con 20 tiendas propias. Otro pilar de crecimiento está en la venta por Internet, que en 2017 creció un 14%.