
El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, ha asegurado hoy que ve "sostenibles" los actuales niveles de dividendo con que la entidad remunera a sus accionistas, que el año pasado fue de unos 300 millones de euros.
Sevilla se expresó de esta forma en la rueda de prensa de presentación de los resultados obtenidos por la entidad en el primer semestre de 2016, que se cerró con un beneficio neto de 481 millones de euros, un 13,4% inferior al de un año antes.
Este recorte, explicó, se debió a varios factores como los menores ingresos por los bajos tipos de interés, y la ausencia de la aportación del CNB de Florida vendido en 2015, por lo que de continuar los resultados por ese camino sí que se elevaría el 'pay out', que es el porcentaje del beneficio que se destina al dividendo y que es del 30%.
Para Sevilla, teniendo en cuenta la evolución del ratio de capital, el actual nivel de remuneración al accionista -el Estado tiene más del 67% de su capital- es sostenible, al mismo tiempo que se mostró contrario a "acumular capital por acumular".
En cuanto a los ajustes de plantilla y oficinas que prevé la competencia, Sevilla aseguró que Bankia ya hizo los deberes en su día, en 2012, cuando recibió las ayudas públicas y tuvo que cerrar una de cada tres sucursales y reducir personal, por lo que no prevé nuevas actuaciones en ese sentido. Por otra parte Bankia y los sindicatos han pactado una subida salarial del 1% para 2017 y del 1,25% para 2018.
Sin embargo, sí que reconoció que la entidad sigue buscando nueva formas de elevar la eficiencia y la productividad, por ejemplo externalizando servicios con poco valor añadido.
Aunque el ROE, que mide la rentabilidad sobre recursos propios, está en niveles bajos por los tipos de interés, Sevilla se mostró convencido de que en los próximos años veremos subidas de dos dígitos.
La entidad ha cerrado este semestre 38 oficinas y probablemente cerrará otras tantas en la segunda mitad del año debido al avance tecnológico, ya que "cada vez se gestiona mas con clientes en remoto", explicó Sevilla.
La iniciativa está teniendo unos resultados muy positivos, con los clientes muy satisfechos y esta tendencia va en aumento, por lo que de los 150.000 clientes que ahora se atienden en remoto, en 2017 podrían pasar a medio millón, dijo.
Preguntado por la posible venta de otro porcentaje de capital en manos del Estado, Sevilla se limitó a recordar que él y su equipo, comandado por el presidente José Ignacio Goirigolzarri, se limitan a gestionar y "son otros" los que toman esas decisiones.
Sobre las demandas por la salida a bolsa
El consejero delegado de Bankia, José Sevilla, se mostró "convencido" de que, "en general", la entidad va a ganar las demandas presentadas por inversores institucionales por su salida a bolsa. Afirmó que "la tendencia del pronunciamiento del Tribunal Supremo que separaba la inversión minorista e institucional se está viendo confirmada por las sentencias".
En esta línea, preguntado concretamente por la demanda de Iberdrola, sostuvo que "hay muchos argumentos para que no prospere".
En consecuencia, Sevilla estimó que alrededor del 90% de la inversión de institucionales, que se situó en 1.200 millones, no tiene riesgo de ser devuelta a través de sentencias. En relación al 10% restante, indicó que se trata de inversión de personas físicas a través de banca privada.
En su conjunto, según explicó Sevilla, Bankia ha devuelto ya unos 4.500 millones de euros a los tenedores de preferentes y a los accionistas por su salida a Bolsa.
A este respecto, y en relación a la próxima recapitalización de los bancos italianos, advirtió de que es mejor no tener en cuenta a la hora de calcular los ratios de capital los instrumentos en manos de particulares, como las preferentes.
De esta manera, cree que se evitaría lo ocurrido en España, ya que los tribunales consideran, a diferencia de lo establecido en el rescate de Bankia, que los particulares no tienen capacidad de absorber pérdidas al no entender los productos complejos.