
El Banco Popular arranca su macroampliación de capital de 2.500 millones de euros con una demanda que casi duplica la oferta. La entidad financiera tiene así más que asegurado el éxito de la operación al recibir peticiones que superan los 4.500 millones de euros, según han informado a elEconomista fuentes del mercado. 'Efecto Popular': el resto de los bancos españoles funde 3.100 millones en tres sesiones.
Con la confianza de los inversores sobre la mesa, la red empieza hoy la suscripción de la ampliación, que ya estaba asegurada por Goldman Sachs y UBS. A su vez, desde hoy y hasta el viernes 10 de junio, los derechos de suscripción preferente cotizarán en el parqué como si fueran acciones, por lo que el inversor podrá vender y comprar en el mercado como si fueran acciones normales. Según las previsiones del banco los nuevos títulos comenzarán a cotizar el 23 de junio.
La entidad que preside Ángel Ron ha empezado una ronda de reuniones con inversores en Londres, Nueva York, París, Boston, Oslo y Basilea, entre otras capitales del mundo, para explicar la ampliación de capital, los números y los objetivos que se persiguen, como elevar las provisiones en 4.700 millones de euros y aumentar la rentabilidad.
"En la medida que se anticipan las provisiones para los próximos años, se anticipan también la rentabilidad a niveles superiores a los existentes ahora en el mercado. Por eso ha habido este interés para suscribir el aseguramiento", explican estas mismas fuentes. Y es que, junto a la subida de la cobertura (se sitúa en el 38% y la entidad planea elevar este porcentaje a final de año hasta el 50%) y los planes de desinversión de activos, el banco se impone subir el ROTE, es decir, la rentabilidad de los fondos propios tangibles, del 3% actual, al 9% en 2018, para situarlo por encima del coste del capital.
Así, la entidad, que prevé dos semanas de reuniones con los inversores, está más que convencida de la buena acogida que tendrá la operación lanzada a pesar de que Ángel Ron prevé perdidas y ha cancelado el dividendo este año. "Se están valorando positivamente las fortalezas del negocio de Pymes", explican distintas fuentes. A su vez, estas fuentes aseguran que el banco cree que los bajistas están detrás del desplome del 32,5% de la acción hasta los 1,59 euros, lo que la sitúa más cerca de los 1,25 euros a los que prevé emitir las 2.004 millones de títulos nuevos.
La urgente ampliación de capital lanzada por el Popular es interesante para los actuales accionistas de la entidad, que deberán acudir si no quieren diluirse un 48%. De momento, Allianz, uno de los miembros del núcleo duro, ha asegurado que acudirá. Los demás se lo estarían pensado.
"Si los accionistas ejercen su derecho de suscripción, estarían comprando acciones a 0,5x Precio sobre Valor Tangible de 2016 frente al 0,8x de Sabadell o Caixabank, ofreciendo un potencial de revalorización del 60% si la acción cotizase en el futuro en línea con los comparables. Además, en caso de cumplirse el plan de negocio, la acción estaría cotizando con una rentabilidad por dividendo del superior al 7% en 2018", explican fuentes del mercado.