
La asociación de consumidores FACUA pide al fabricante de 'Counter-Strike: Global Offensive', el estadounidense Valve, que elimine la simbología etarra de su videojuego por sensibilidad y respeto a la memoria de las víctimas. La nueva entrega de esta franquicia permite a emular a terroristas, denominados Separatists (separatistas), que aparecen ataviados con capuchas blancas y txapelas.
En concreto, este juego permite ponerse en la piel de los terroristas como del grupo policial francés GIGN.
FACUA pide a la empresa que asuma el código de conducta de la industria del videojuego en Europa, PEGI, y no muestre imágenes que puedan atentar contra la dignidad de determinados sectores.
"La banalización del sufrimiento y la violencia que hace este tipo de videojuegos contradice lo que predica la propia industria a través de su código de conducta, que establece expresamente que no atentará contra la dignidad humana", recalca.
Por ello, le llama a que tenga respeto, en este caso, a la memoria de las 864 víctimas mortales de la banda.