
El lehendakari Patxi López ha reclamado hoy «unidad» política y social para luchar con «mayor eficacia» contra ETA y ha asegurado que "no hay nada que hablar con una banda que sólo se dedica a asesinar".
Según las mismas fuentes, un testigo vio huir a los dos individuos, apuntó la matrícula y se la facilitó a la Policía, que comprobó que pertenecía a otro coche de San Sebastián, concluyendo así que los sospechosos colocaron las placas falsas al vehículo robado en Valencia, idéntico al de San Sebastián.
En estos momentos, los investigadores tratan de determinar si el suceso ocurrido esta madrugada está relacionado con la actividad de la organización terrorista ETA.
Continúa la investigación
Por otra parte, continúa la investigación de los dos atentados cometidos por ETA esta misma semana en Burgos y Palma de Mallorca. El primero tuvo lugar la madrugada del 29 de julio en una Casa Cuartel de la Guardia Civil y provocó 46 heridos leves e importantes daños materiales, mientras que el segundo se produjo el pasado día 30 de julio y se saldó con la vida de dos Guardias Civiles.
La Guardia Civil cree que los autores del atentado de Mallorca habrían tenido tiempo de huir de la isla al haber utilizado bombas-lapa con temporizador colocadas la noche anterior. Los investigadores se apoyan en las fotografías que los artificieros realizaron a la segunda bomba-lapa colocada en los bajos de un coche del Cuerpo aparcado en las proximidades del cuartel de la Guardia Civil en Calviá.
Los artificieros lograron fotografiar la segunda bomba antes de explotarla de forma controlada y comprobaron que era una 'lapa' que se activa al movimiento del vehículo, siempre a partir de que se agote el tiempo programado en el temporizador.
El hecho de que los dos Guardias Civiles que perdieron la vida el pasado jueves circularan con el vehículo oficial sin que se activase la bomba se debe a que el temporizador estaba activado para liberar el dispositivo de movimiento a partir de una determinada hora de la mañana del jueves. De esta forma, los terroristas habrían colocado las dos bombas-lapa programadas para estallar al día siguiente, con tiempo de sobra para abandonar la isla de Mallorca.
Las fotografías realizadas por los miembros del Grupo de Especialistas en Desactivación de Explosivos (GEDEX) de Guardia Civil muestran además cómo los terroristas prescindieron de los habituales imanes para adosar la segunda bomba-lapa a los bajos del coche y la asieron con bridas de plástico al vehículo, que se encontraba en desuso desde hacía más de un mes.