
Es muy posible que ahora mismo, usted, estimado lector, mientras desliza la mirada por esta fila de letras con más o menos sentido, se encuentre sentado. Quizá lo haga a la sombra de un parasol en la arena de la playa (afortunado, entonces), o tal vez en una silla de oficina frente al ordenador (lo sentimos); o quizá sobre el asiento de un transporte público o en el rincón preferido del salón de su casa.
Los seres humanos tenemos la curiosa costumbre de sentarnos sobre una silla, ya sea para leer un libro (o la pantalla del móvil), ver la televisión, trabajar delante de un escritorio, viajar en tren, tomar una cerveza en la terraza de un bar o, simplemente, para relajar la mirada y divagar un rato.
A la derecha, silla 'Córdoba', diseñada por Equipo 57 (ilustraciones de Antonio Solaz).
Casi siempre que realizamos este acto cotidiano lo hacemos sobre una silla, un objeto aparentemente insignificante y común, pero que puede contar muchas cosas sobre nuestra forma de entender la vida (o sobre nuestros gustos estéticos o personales).
No siempre reparamos en ellas, pero las sillas han tenido una gran influencia en nuestra historia colectiva.
Así lo creen desde la editorial La Fábrica, que acaba de lanzar al mercado su nuevo libro: Sillipedia: 101 historias de sillas, una obra enciclopédica sobre el inusual pero fascinante mundo de este objeto, omnipresente en cualquier cultura del globo.
Promovido por la firma de mobiliario Andreu World, la obra recopila hasta 101 anécdotas, historias y relatosescritos por veinte autores 'especialistas' en el tema (la mayoría arquitectos, diseñadores o historiadores) relacionados con el hecho de asentar nuestro trasero sobre una superficie plana, un acto que nos diferencia de casi cualquier otra especie animal.
El proyecto, que ha llevado un considerable tiempo de elaboración, comenzó a gestarse hace ya cinco años y coincide ahora en su lanzamiento con el 65 aniversario de la firma Andreu World, una de las más destacadas empresas españolas (valenciana, concretamente) de mobiliario.

Cada silla que vemos a nuestro alrededor nos cuenta una historia, propia y diferente. Las hay vanguardistas y de diseño, de bellas y delicadas curvas; y otras simples y sencillas a más no poder, fabricadas en serie, con materiales baratos. Pero todas ellas con una función y una aportación que ofrecer.
La obra (dirigida por Ramón Úbeda) cuenta además con una abundante parte ilustrada: 21 retratos y 245 dibujos de sillas realizados por Antonio Solaz.
Así, página a página, podremos ir descubriendo por qué las sillas del hotel Ritz disminuían su tamaño para hacer ver aún más grandes sus salones, apreciaremos el arte creador de genios como Mies van der Rohe (uno de los 'autores' de sillas más idolatrados por los amantes del diseño) o Le Corbusier, o sabremos por qué la humilde silla ibicenca, ejemplo de la más ancestral tradición mediterránea, ha encontrado su espacio en el prestigioso Museo de Artes Decorativas de Fráncfort.

Así que, la próxima que se levante, antes de alejarse de ella, dele una pequeña palmada de agradecimiento a su silla porque, como alguien dijo alguna vez, mientras ella trabaja, usted descansa.