Ryanair ha anunciado que no aplicará la tasas para personas obesas, medida que estaba estudiando, ya que "no hay manera de cobrarla sin interferir en los 25 minutos de espera entre vuelo y vuelo, así como en el proceso de facturación online".
El responsable de Comunicación de la aerolínea, Stephen Mcnamara, ha explicado que, dado que se implementará la facturación electrónica a partir de octubre en toda la red, no puede aplicarse dicha tasas sin interferir en "la puntualidad incorporable" de la aerolínea.
Mcnamara ha añadido que Ryanair "seguirá analizando" de qué manera evitar gastos innecesarios para algunos pasajeros y contribuir a que los precios sigan bajando.
Cobrar por el papel del baño
La compañía de bajo coste irlandesa ha informado de que más de 16.000 pasajeros participaron en dicha encuesta en la que se les animaba a votar entre una serie de tasas adicionales entre las que se encontraban el pago de una 'tasa para obesos', el cobro por el uso del papel del baño con la cara de O'Leary, por fumar o por la suscripción anual a la web.
Los pasajeros, a favor de la tasa
El 37% de los votantes, 30.000 pasajeros, se ha declarado favor de la tasa para personas obesas, y de ellos, 16.000 participaron con su voto entre las diferentes sugerencias propuestas por Ryanair.
Así, un 46% votó por cobrar cada kilo de más a los hombres que superen los 130 kilos y a las mujeres que superen los 100 kilos, el 11% por cobrar por cada punto que se exceda de los 40 puntos del Índice de Masa Corporal, y un 6% se mostró a favor de cobrar por cada pulgada de cintura que supere los 45 en los hombres y los 40 en las mujeres.
La semana pasada el presidente de Ryanair, Michael O'Leary, recalcó que la medida no era discriminatoria y añadió que, en cualquier caso, "no va en contra de la ley" pesar a los pasajeros antes de subir al avión por motivos de seguridad.
