A todas las personas nos gusta lucir una sonrisa perfecta y queremos que nuestros dientes presenten la tonalidad más clara posible, es decir, que transmitan un aspecto sano y estético. Ahora bien, no es algo que se consiga de la noche a la mañana.
Tal y como destacan los expertos, el blanqueamiento dental se ha convertido en el tratamiento más solicitado en las clínicas especializadas en la sonrisa en los últimos meses. Eso sí, puedes ahorrarte un buen dinero y seguir una serie de trucos para blanquear tus dientes en casa.
La lista completa
Sí, y verás como en pocas semanas empiezas a notar los efectos. En primer lugar, cabe destacar la pasta dental blanqueadora -no recomendable para los pacientes con hipersensabilidad dental al frío- que contiene agentes químicos y mecánicos con un grado de agresividad moderado.
Los compuestos más habituales de estas pastas son las sílices, carbonato cálcico, papaína, polivinilpirrolidina, hidroxipatita, peróxido de carbamida y peróxido de hidrógeno. No es aconsejable usarlas más de tres veces al día.
En segundo lugar, conviene señalar las tiras blanqueadoras dentales. Son fáciles de usar y ofrecen resultados más que visibles casi al instante. Utilizando una fórmula avanzada, eliminan de manera eficaz las decoloraciones y las manchas, dejando los dientes más blancos y radiantes.
Además de su efectividad probada, las tiras blanqueadoras son seguras para el esmalte dental y causan cero sensibilidad. Los especialistas recomiendan usarlas un mínimo de 14 días consecutivos, una aplicación al día, y hasta un máximo de 28 días seguidos.
Por último, los kits blanqueantes. "Estos productos presentan el inconveniente de que, como los moldes protectores no son específicos para cada persona, pueden dar lugar a un efecto blanqueante irregular, irritación gingival o sensación de dolor o incluso una ingesta accidental del producto blanqueante", ha afirmado Arantxa Sainz de los Terreros, farmacéutica responsable de formación de Laboratorios Viña, a 'Esquire'.
