Los cinco detenidos esta noche por la Ertzaintza acusados de participar en los incidentes registrados en la localidad guipuzcoana de Hernani, en el transcurso de una manifestación de la izquierda abertzale prohibida, en los que se quemaron contenedores y cajeros automáticos, han quedado en libertad a la espera de ser llamados por el juez.
Según han informado fuentes del departamento vasco de Interior, los incidentes comenzaron cerca de las nueve menos cuarto de la noche y se prolongaron hasta las diez y media aproximadamente en la localidad guipuzcoana, donde la organización ilegalizada de apoyo a los presos de ETA Askatasuna había convocado un acto que fue prohibido por la Audiencia Nacional.
Los desórdenes se produjeron después de que agentes de la Ertzaintza dispersaran a los proetarras. Los agentes tuvieron que cargar con material antidisturbios contra los radicales, que profirieron gritos en contra de la Ertzaintza y a favor de ETA.
Los violentos quemaron contenedores y colocaron barricadas incendiarias en distintas calles del municipio. También colocaron otra barricada en la carretera comarcal GI-131. Quemaron, asimismo, dos cajeros pertenecientes al Banco Guipuzcoano y al Banco Santander, respectivamente.
Un vehículo resultó afectado por el fuego provocado por los violentos, que también rompieron la cristalera de una agencia de viajes del municipio, según precisaron las mismas fuentes.
