
España defenderá a partir de mañana su posición en cuanto a la pesca de altura, ante los ventisiete países que componen la Unión Europea. La difícil misión del Gobierno español pasa por convencer a una comisión dispuesta a reducir el número de capturas, lo que agravaría la economía de armadores y pescadores españoles.
En el apartado de Pesca, abordarán las cuotas para las flotas en aguas profundas y España solicitará que no se prohíba la pesca de ninguna de las especies implicadas.
El Consejo de ministros de la UE, al que acudirá la ministra de Medio Ambiente y Medio Rural y Marino, Elena Espinosa, comienza mañana a las 10.00 horas con las cuestiones relacionadas con la pesca.
Tratarán en primer lugar las posibilidades de pesca del bacalao en el mar Báltico y las de ciertas especies en el mar Negro, dos asuntos que no afectan directamente a España.
Fuentes diplomáticas precisaron que el único interés español en este punto es que las medidas de control y gestión del esfuerzo pesquero sean "equiparables" a otras aplicadas en zonas en las que sí están presentes los buques españoles.
Posibilidades
Los ministros europeos buscarán un acuerdo político sobre la propuesta de la Comisión Europea sobre las posibilidades de pesca de determinadas especies de aguas profundas para el periodo 2009-2010. Bruselas aboga por reducir a cero en el segundo año el total admisible de capturas (TAC) de tiburón y reloj anaranjado y por realizar reducciones de un 15 por ciento en otras especies.
En el caso del tiburón y del reloj anaranjado, la CE propone que antes de prohibir su pesca en 2010 se reduzcan las posibilidades de pesca en un 50 por ciento en 2009 con respecto al año anterior.
Al igual que varios Estados miembros -considera que reducir a cero las TAC "implica tirar desde el principio" la pesca accesoria, especialmente en el caso del tiburón de profundidad.
No obstante, reconoce que se trata de especies en una situación biológica "cada vez más delicada" y solicitará cuotas "testimoniales" para que la flota no tenga que deshacerse de especies "con valor económico" y que son capturadas durante la pesca de otras.
La Comisión Europea "revisará" la solicitud de esta medida, que ya se aplica a determinadas especies como el sable negro, según aseguraron fuentes diplomáticas.
España pedirá cierta "flexibilidad" en otras medidas de gestión que quiere introducir el Ejecutivo comunitario. En el caso de la captura del granadero de roca, para cuya pesca la flota española tiene derechos en dos zonas, España argumenta que hay estudios científicos que confirman que se trata de la misma población en ambos casos y, por tanto, quiere poder capturar en unas aguas parte de lo que se le permite en las otras si esa cuota no ha sido utilizada.