Naciones Unidas, 24 oct (EFE).- El secretario general de la ONU, Ban Ki-moon, es favorable a que se amplíe el número de países que participarán en las próximas reuniones económicas internacionales, como la del G-20, en la que se abordarán las medidas globales a tomar para atajar la actual crisis económica y financiera.
Ban, en una declaración escrita distribuida hoy por su portavoz, Michele Montas, señala la "responsabilidad" de la ONU en liderar "un multilateralismo incluyente que quede reflejado en cualquier discusión sobre las reformas del sistema monetario y financiero internacional".
Asimismo hace referencia a la reunión que el máximo responsable de la ONU tuvo el jueves con cinco prestigiosos economistas internacionales para evaluar posibles escenarios y actuaciones con el objetivo de que las víctimas de esa crisis no sean los países en desarrollo que reciben asistencia internacional.
"Las conversaciones se centraron en la necesidad de ampliar la participación y, en particular, en la necesidad de incluir las voces de los países más pequeños y pobres en los debates sobre la arquitectura institucional internacional y las reformas que hay que considerar", indica el comunicado.
La referencia a esa ampliación de la participación es la reunión del Grupo de los Veinte (G-20), integrado por países ricos y otros con economías en desarrollo, que Estados Unidos ha convocado para los días 14 y 15 de noviembre para abordar ese problema.
Ban ya propuso el pasado 18 de octubre que la cumbre se celebrará en la sede de Naciones Unidas en Nueva York, una petición no escuchada por la Casa Blanca y una decisión que no ha sentado muy bien en algunos círculos diplomáticos, que consideran poco democrático que la receta para resolver un problema global sea adoptada por un grupo reducido de países.
En esa misma línea se ha situado el presidente de la Asamblea General, el nicaragüense Miguel D'Escoto, quien "cree que las soluciones y el diálogo no deben darse solamente en el G-8, o el G-20, o, pongamos, el G-40, sino en el G-192 que es la Asamblea General de la ONU", indicó su portavoz, Enrique Yeves.
D'Escoto ha convocado una reunión de alto nivel sobre la crisis para el próximo 30 de octubre y ha nombrado un grupo de expertos para preparar el encuentro que está encabezado por el economista Joseph Stiglitz.
La otra reunión que para Ban es un entorno apropiado de discusiones multilaterales es la Conferencia del Desarrollo que tendrá lugar en Doha (Qatar) del 29 de noviembre al 2 de diciembre, y que está llamada a tener nivel de asistencia de Jefes de Estado o de Gobierno.
Ban, en la declaración escrita, asegura que la "era de la autorregulación se ha terminado. Las instituciones financieras internacionales no pueden funcionar como hasta ahora. En el diseño de las reformas hace falta un acercamiento global".
"Si nos guiamos por la historia, la prolongación de un periodo de desaceleración económica sólo puede evitarse si los estados resisten las presiones de adoptar medidas comerciales proteccionistas al tiempo que siguen políticas macroeconómicas adecuadas", agrega el responsable de la ONU.
Para Ban los países en desarrollo necesitarán mayor apoyo de las instituciones financieras internacionales para evitar la ampliación de los efectos de la crisis y las economías menos desarrolladas, más recursos de asistencia para lograr los objetivos.