
El candidato del PSPV-PSOE a la Presidencia de la Generalitat Valenciana, Ximo Puig, se ha comprometido este jueves a liderar un gobierno "desde la dignidad del comportamiento y la sinceridad en las afirmaciones".
Ximo Puig ha comenzado su discurso en el pleno de las Cortes Valencianas, en el que será investido presidente de la Generalitat, expresando su "fe en la democracia y en el autogobierno" y ha subrayado que "no hay futuro sin memoria ni memoria sin justicia".
Así se ha comprometido a liderar un gobierno "desde la dignidad del comportamiento y la sinceridad en sus afirmaciones", porque ha resaltado que "la política necesita que nuestras palabra tenga validez". Asimismo, ha indicado que su Gobierno contará con "el apoyo de diversos partidos", pero ha aclarado que no será "un gobierno de partidos", porque considera que "no hay democracia sin solidaridad".
"No puedo garantizar que todos valencianos tengan éxito en su vida, pero me comprometo a hacer que tengan las mayores oportunidades para conseguir ese éxito", ha dicho Puig, quien se ha comprometido a ser "implacable contra cualquier forma de discriminación". Además, ha defendido "democracia, memoria, convivencia, unidad, solidaridad y laicisimo".
"Tentaciones del populismo"
Por su parte, el portavoz del PP en las Cortes valencianas y aún presidente en funciones de la Generalitat, Alberto Fabra, ha defendido con "orgullo" la gestión que ha hecho su Gobierno en los últimos cuatro años, "los peores de la crisis" y ha afirmado que deja una Comunitat Valenciana "mejor que como la encontró en 2011".
Asimismo, ha insistido en que, aunque los 'populares' son la fuerza más votada, las "reglas de la democracia" van a permitir al socialista Puig gobernar con un "multipartito" -PSPV, Compromís y Podemos- y por ello le ha pedido que se aleje de "tentaciones del populismo".
Fabra, ha hecho un breve balance de sus cuatro años de gobierno, al que accedió tras la dimisión de Francisco Camps por el 'caso de los trajes', ha subrayado que está "satisfecho" de su labor aunque ha lamentado no haber sabido "conectar" con los ciudadanos. Esto lo ha atribuido, en parte, a que sus esfuerzos estaban "centrados" en las medidas para salir de la crisis y, en parte, porque se han quedado "cortos" en la lucha contra la corrupción y han pagado el "retraso en la salida de algunas personas imputadas en sus cargos".
El síndic del PP también ha señalado a su grupo que estos resultados deben servir de "autocrítica y a la vez de estímulo para avanzar hacia un nuevo tiempo político". Asimismo, le ha deseado a Puig "suerte por el bien de todos y de la Comunitat", especialmente cuando va a gobernar "con los peores resultados del PSPV" y a falta de un "apoyo sólido". "Sabemos que va a ser presidente de la Generalitat, pero no sabemos quién va a gobernar realmente la Comunitat", ha agregado.