
Cambiar el modelo productivo. Ese es el eslogan bajo el que oscila el programa de Podemos en Andalucía. Lo presentó ayer la candidata a presidir la Junta por la formación morada, Teresa Rodríguez, quien prometió como primer paso para promover una "economía sostenible" favorecer los contratos con pymes y cooperativas en detrimento de acuerdos con "grandes empresas" o, entre otras medidas, "desprivatizar el servicio de agua".
Un plan de 100 días
Al margen de estos objetivos "a largo plazo", la formación de Iglesias ha prometido erigir "un plan de emergencia social" que presupuesta en 215 millones de euros. Esta hoja de ruta, "sus líneas rojas" a la hora de pactar con otras formaciones tras las urnas, incluye la paralización temporal de todos los desahucios o el suministro de suministros básicos a todos los ciudadanos como luz o gas que no puedan pagarlos.
La batalla contra estas empresas es compartida con el secretario general del partido quien ya ha apuntado que, una de sus primeras medidas, sería fijar un "precio político" de la luz o la calefacción. Precisamente el programa de Rodríguez incluye también "priorizar la autogestión en las energías renovables".
A largo plazo, Podemos apuesta por establecer la dación en pago, subir la inversión en I+D+i hasta el 2% del PIB, auditar la deuda y acabar con los recortes en sanidad y en educación. La campaña oficialmente comienza mañana con una pegada de carteles en Cádiz y acaba el 20 con un mitin en Sevilla al que acudirá Pablo Iglesias.
Para centrarse en este proyecto, Rodríguez ha dejado su puesto como eurodiputada, escaño del que hoy toma posesión Miguel Urbán, el que fuera rival de Luis Alegre para dirigir la candidatura de Claro que Podemos en la Comunidad de Madrid.