Aunque la primera vez que Mariano Rajoy entonó un "me equivoqué" fue en agosto de 2013 por el 'caso Bárcenas', el presidente del Gobierno, que ayer pidió perdón a los españoles por la corrupción, ya había negado con anterioridad varios de los escándalos relacionados con el PP.
Ya el 11 de febrero de 2011 el presidente qitaba hierro a la investigación en torno a la red Gürtel: "Esto es una trama contra el PP. Nadie podrá probar que no son inocentes".
Cuando saltó a los medios la polémica por los papeles del extesorero del PP Luis Bárcenas el 3 de febrero de 2013, Rajoy también negó la mayor: "Todo eso es falso, salvo alguna cosa".
Aquel "salvo alguna cosa" y su comparecencia ante los medios a través de un plasma de televisión fueron aplazamientos de lo finalmente inevitable: la comparecencia del 1 de agosto de 2013 ante el pleno del Congreso.
En esa esperada sesión, el presidente del Gobierno de disculpó por haber confiado en el extesorero del PP: "En dos palabras. Me equivoqué. Lo lamento, pero fue así".
No obstante, el pasado 17 octubre 2014, lejos de pedir disculpas, el líder del PP negaba a Rodrigo Rato en plena polémica por las tarjetas B de Caja Madrid: "Esa persona a la que usted se refiere".
El último episodio de esta cronología ha sido la petición, ayer martes, de disculpas a los españoles por todos los casos de corrupión que están saliendo a la luz, justo después de que el pasado 26 octubre el propio Rajoy se refiriese a los mismos como "unas pocas cosas".
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Un perdón forzado
