EN DIRECTO: El proceso catalán. El pasado martes, Artur Mas se dirigía a los medios de comunicación desde el Palau de la Generalitat para explicar el por qué retiraba la consulta soberanista el 9-N, al tiempo que detallaba la alternativa de otro referéndum, esta vez en el marco de la "participación ciudadana". Nada más conocerse su argumentario, la letra menor de la convocatoria ha suscitado las dudas de los partidos proconsulta y las críticas de la prensa. Estas son las 'ocurrencias' que Artur Mas ha diseñado para el nuevo 9-N.
-Sin decreto: Artur Mas se ha buscado un recoveco legal para celebrar un sucedáneo de la consulta de la que a priori había anunciado. Convencido de que el Tribunal Constitucional no dará cobertura a sus pretendidas aspiraciones soberanistas, el president ha encontrado la alternativa de un proceso participativo, que según la norma catalana, tiene expresión en tres formas: encuestas, audiencias públicas y foros de participación.
-Sin censo: Artur Mas no podrá utilizar el único censo que da garantías democráticas a este proceso. Interior es el órgano competente para prever de esta información a la Generalitat. Y la disposición del Gobierno es nula. Tampoco los ayuntamientos catalanes podrán colaborar con sus registros, que en todo caso deben ponerse al día con los del Ministerio de Interior. La desobediencia de los alcaldes y de los funcionarios municipales tendría consecuencias legales, de manera que a Mas se le ha ocurrido que el censo se haga in situ. Es decir, el elector o encuestado mayor de 16 años, extranjero o español, pero con residencia en Cataluña, constatado al menos en el DNI, podrá votar y en ese momento su nombre entrará a formar parte del censo. El Govern ha programado un sistema informático que recogerá quien haya depositado su voto, y por tanto ya no podrá hacerlo en ningún otro sitio.
-Sin colegios. Artur Mas se tendrá que olvidar de los 4.000 colegios electorales anunciados en principio. Su apertura es también ilegal. Ahora, y según la información dada por él mismo, se votará en 600 locales, todos ellos dependientes de la Generalitat.
-Sin personal. Ayer lo dijo Francesc Homs: se necesitan 20.000 voluntarios. Este miércoles, el Govern arrancaba su campaña de captación de voluntarios para custodiar unas urnas de papel fabricadas por los presos de la cárcel de Lleida, como ya publicó EcoDiario.es en mayo de este año. El conseller de la Presidencia y portavoz especificaba ayer que se necesitan 18.000 voluntarios, a razón de tres por mesa, y unos 3.000 funcionarios voluntarios para garantizar el cumplimiento de los procesos administrativos.
-16 días para votar. Así lo confirmó ayer el portavoz de la Presidencia. La fecha no cambia. El 9-N es inamovible, pero el Govern propone que, además de este día se podrá votar los 15 días siguientes a la convocatoria inicial de esta consulta-encuesta.
-El resultado de la 'consulta'. Homs, "dispuesto a hacer lo que haga falta", quiere que se den a conocer los resultados "provisionales" el día después del 9-N, "como en Escocia". Si embargo, el Govern tendrá abiertos sus locales 15 días más.
-Las papeletas. El aspecto más discutido legalmente. El Gobierno de Mariano Rajoy ya ha avanzado su intención de recurrir de nuevo al Constitucional si en esta suerte de sondeo se mantienen las mismas preguntas que inicialmente se pensaron para la consulta soberanista del 9-N: ¿Quiere usted que Cataluña sea un Estado? Y si es sí, ¿Quiere que sea independiente?
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El verdadero miedo de Artur Mas