
El presidente catalán, Artur Mas, ha ratificado el acuerdo aprobado por el Parlament y firmó ayer el decreto de designación de los siete miembros que integrarán la comisión de control de la consulta del 9 de noviembre. | Artur Mas ignora al Constitucional y firma el decreto para crear la junta electoral del 9-N.
Mas no desiste en su plan soberanista y continúa adelante con su hoja de ruta a pesar de la suspensión de forma cautelar de la ley de consultas y el decreto de convocatoria por el Tribunal Constitucional (TC). Este órgano, que equivale a una junta electoral, se encargará de garantizar el proceso.
La firma se produjo un día después de que el Parlament aprobara la designación de los siete miembros de la comisión, una decisión que PSC, PP y Ciutadans se negaron a votar, al considerar que significaba traspasar una línea roja, ya que tanto la ley como el decreto de convocatoria habían sido suspendidos por el TC. Con esta decisión responde a su socio de gobierno, ERC, que le presiona para reactivar los preparativos de la consulta, una opción de la que también es partidaria la CUP.
Además, hoy Mas se reunirá con los líderes de los partidos favorables a la consulta (ERC, ICV-EUiA y la CUP), tras haber mantenido de forma bilateral encuentros con todos ellos esta semana. Con esa reunión, el Ejecutivo pretende mostrar unidad y fijar la estrategia a seguir a partir de ahora tras la decisión del TC.
'Caso Pujol'
Por su parte, el Parlamento catalán aprobó ayer por unanimidad crear una comisión de investigación sobre el caso Pujol, el fraude y la evasión fiscal y las prácticas de corrupción política. Así lo acordó ayer el pleno de la cámara catalana con los 131 votos a favor de todas las formaciones políticas, incluida CiU, que decidieron tirar adelante la comisión impulsada por ERC, ICV-EUiA y la CUP.
La oposición considera que el expresidente catalán Jordi Pujol no despejó las dudas durante la comparecencia en el Parlament la semana pasada sobre el origen de la fortuna que ha tenido en el extranjero sin regularizar durante más de 30 años. Todos los partidos coinciden en destacar que Pujol no dio respuesta sobre su patrimonio oculto y con esta comisión pretenden que el exmandatario catalán aclare todas las dudas sobre este caso.
Por su parte, Ciutadans y PP presentaron otra comisión para investigar cuentas corrientes bancarias en paraísos fiscales a nombre de cargos y excargos públicos y sobre el enriquecimiento ilícito y el cobro de comisiones ilegales de estos, que fue rechazada. Ambas formaciones son partidarias de profundizar en el caso Pujol y sus posibles ramificaciones.
El PP quiere saber si las prácticas irregulares de los Pujol implican a CDC y a la Generalitat. El líder de Ciutadans, Albert Rivera, dijo que quiere aclarar si "el Palau de la Música fue una lavadora de dinero de los gobiernos de CiU". La CUP calcula que en Cataluña el fraude fiscal asciende a 16.000 millones anuales y en la comisión quiere que den explicaciones en el Parlament la familia Carulla, Sumarroca y Carceller.
Una vez aprobada la comisión, ahora falta concretar fecha, saber quién la presidirá y fijar el calendario de trabajo.
Campaña soberanista
Por otro lado, Convergencia presentó ayer su campaña a favor del doble sí en la consulta soberanista del 9 de noviembre, que se suma a la impulsada por la Assemblea Nacional Catalana (ANC) y Òmnium Cultural, organizadores de la movilización del 11 de septiembre.
Con el lema Seamos positivos. Unidos por un país nuevo, CDC emprende su campaña a pesar de que la ley de consultas y el decreto de convocatoria están suspendidas de forma cautelar por el Tribunal Constitucional (TC). Sobre esta última cuestión, el Parlamento catalán presentará un escrito de recusación contra el presidente del TC, Francisco Pérez de los Cobos, y del magistrado Pedro José González-Trevijano, para que se abstengan de intervenir en los recursos del Gobierno central contra la consulta del 9 de noviembre, ya que considera que han manifestado sus afinidades ideológicas con el PP.