El Gobierno tendría preparadas todas las vías de actuación posibles si finalmente Artur Mas se decanta por realizar el referéndum de independencia de manera ilegal y rebelándose contra el fallo del Constitucional. De este modo, Rajoy asumiría las competencias de Cataluña en materia de educación y seguridad para impedir la celebración de la consulta, según recoge ABC.
Por lo tanto, se llevaría a cabo la aplicación del artículo 155 de la Constitución, que recoge que si una Comunidad Autónoma no cumple con las leyes que le imponga la Constitución, el Gobierno, siempre con la mayoría absoluta del Senado, podrá adoptar las medidas necesarias para obligar a aquélla al cumplimiento forzoso de dichas obligaciones. Del mismo modo, y para hacer cumplir lo anterior, el Gobierno podrá dar instrucciones a todas las autoridades de las Comunidades Autónomas.
Al asumir la educación y la seguridad, Rajoy impediría la celebración de la consulta, ya que evitaría que los colegios fueran sede electoral y dispondría de los Mossos d'Esquadra para hacer cumplir la orden.
Ley de consultas en proceso
Por su parte, el Parlamento catalán aprobará el viernes 19 de septiembre la ley de consultas no refrendarias, una normativa que algunos grupos pretenden que sirva para dar cobertura legal a la consulta soberanista del 9 de noviembre.
La cita será un día después del referéndum de independencia de Escocia, que se celebrará el jueves 18.
Con el apoyo del grupo socialista, la ley tirará adelante en el pleno extraordinario que celebrará el Parlamento catalán. Una vez aprobada, se prevé que Mas firme en cuestión de horas el decreto de convocatoria de la consulta del 9 de noviembre, aunque el Gobierno ya ha avanzado que presentará un doble recurso al Tribunal Constitucional (TC) para que suspenda la propia ley y el decreto oficial.
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