Desde 2011 cuando Mariano Rajoy llegó a Moncloa, el presidente no ha tenido ningún año para disfrutar de unas vacaciones tranquilas. En el verano de 2012, la prima de riesgo disparada hasta casi los 700 puntos le impidieron aprovechar un mes de descanso en Galicia sin estar pegado al movil.
El verano pasado por su parte, estuvo marcado por las informaciones sobre Bárcenas, que no dieron tregua ni en la época estival. Tanto es así, que Rajoy tuvo que cambiar su destino a Ribadumia, una localidad más pequeña, en lugar de Sanxenxo -ambas en Pontevedra-, para evitar molestias.
Sin embargo, para Rajoy este año todo está en calma: baja el paro, España empieza a recuperarse y el tema de Bárcenas ha pasado a un segundo plano.
El jefe del Ejecutivo asegura que "por fin tendrá vacaciones tranquilas".Pero no conviene tentar a la suerte. No vaya a ser que el verano se gafe.
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Rajoy repite vacaciones en Doñana y Galicia