
Victoria Álvarez, exnovia del primogénito del expresidente de la Generalitat, Jordi Pujol, habla sobre la empresa de flores de la que iba a ser su suegra. La compañía de jardinería y comercio de flores ornamentales que regentaba Marta Ferrusola desde 1989 se llama Hidroplant.
Según Álvarez todos sabían en Barcelona que contratar a la floristería era "un impuesto revolucionario casi" y que "cada persona que montaba un hotel, un edificio oficial, tenía que montar un jardín japonés o un jardín no sé qué, incluido el césped del Camp Nou que se convirtió en un patatal".
La Voz de Galicia recoge hoy que cuando Jordi Pujol estaba al poder en Cataluña el IVA estaba reducido para todos los negocios de plantas. Se quedaba en un 10 por ciento.
En 1994 pasó de aplicarse la norma general a la venta de flores a este tipo reducido. Entonces Felipe González estaba en el Gobierno y CiU había puesto como condición para aceptar los presupuestos esta reducción en el impuesto del valor añadido de las plantas.
Más irregularidades
En estos momentos, el juez Ruz está investigando a la familia Pujol Ferrusola empezando por el primogénito.
Las cuentas de Jordi Pujol hijo están en entredicho y el juez Ruz busca indicios de delito en una serie de comisiones hacia 17 empresas distintas que podrían haber hecho al exnovio de Victoria Álvarez embolsarse más de ocho millones de euros.
De momento, Ruz ha citado al hijo del expresident y a su exesposa teniendo entre sus manos un informe de la Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (UDEF).
En la inmensa mayoría de los casos, la policía se ha encontrado con que los empresarios no aportaban ninguna documentación de sus tratos comerciales con Jordi Pujol Ferrusola.
Marta Ferrusola "lo sabía"
Victoria Álvarez dejó claro que Ferrusola que conocía y era totalmente consciente de lo que hacían sus hijos.
Escuchó en una conversación telefónica de Marta Ferrusola con su hijo Jordi que "el dinero ya estaba donde tenía que estar".