
ERC, que rechazaba abrir una comisión de investigación sobre el escándalo del expresidente Jordi Pujol, cambió este martes de opinión y se suma así a todos los grupos de la oposición, que exigen que Pujol dé explicaciones en el Parlament sobre las cuentas sin regularizar que su familia ha tenido durante más de 30 años en el extranjero.
El expresidente de la Generalitat deberá comparecer finalmente ante la cámara catalana después de que todos los grupos de la oposición firmaran este martes una petición de comparecencia, que se votará este jueves en una Junta de Portavoces Extraordinaria. Gracias al apoyo del partido liderado por Oriol Junqueras, los grupos suman la mayoría necesaria para exigir a Pujol las explicaciones pertinentes.
CiU es la única formación que no ha firmado, por ahora, la petición de una comparecencia, que deberá producirse en agosto con la convocatoria de la Diputación Permanente o en septiembre, una vez se inicie de nuevo el curso parlamentario. El diputado de ERC Oriol Amorós avanzó este martes que los republicanos suscriben también esa petición, por lo que se suman finalmente al resto de grupos de la oposición que a lo largo de los últimos días ya habían avanzado que pedirían que el expresidente catalán compareciese ante el Parlament.
Presunto fraude fiscal
La petición había sido solicitada inicialmente sólo por PP y Ciutadans, que tomaron esta decisión tras la confesión del viernes de Pujol, pero después se han ido sumando el resto de grupos de la cámara, excepto el partido de gobierno.
Este jueves, probablemente la mayoría o todos los grupos de la oposición (ERC, PSC, PP, Ciutadans, ICV-EUiA y la CUP) secunden la petición de comparecencia de Pujol en comisión parlamentaria. CiU considera que no firmará esta petición porque las explicaciones que deba dar Pujol serán ante la administración tributaria y la justicia.