
La ofensiva israelí en Gaza, en la que ya han fallecido más de medio millar de personas, gran parte mujeres y niños, también fue discutida ayer por los ministros de Exteriores europeos.
Sin embargo, las conclusiones de la reunión poco ofrecieron aparte de la esperada condena por la matanza de cientos de civiles y una llamada a la creación de los dos Estados.
Con una Europa enredada con la crisis ucraniana, y EEUU reacio a intervenir decididamente, a pesar de las gestiones de su secretario de Estado, John Kerry, el peso de la mediación está cayendo en actores de la zona como Egipto. Los europeos calificaron de "actos criminales e injustificados" el lanzamiento de cohetes por parte de Hamas, mientras que dijeron que estaban "particularmente impactados" por el coste humano de la operación israelí, que recordaron que tiene que ser proporcional y en línea con el derecho internacional humanitario.
Una conferencia internacional
El ministro de Exteriores, José Manuel García Margallo, fue un paso más allá al pedir que la UE asuma un papel protagonista y organice una conferencia internacional, junto con la Liga Árabe y con el apoyo de EEUU, con la que lograr una solución duradera para el conflicto en Oriente Medio. "Hay una coincidencia general en que esto debe ser resuelto por una conferencia internacional", dijo tras la reunión de los ministros.
De esta manera se podría lograr "un plan que haga suficientemente atractiva esta solución de los dos Estados" para los israelíes y palestinos. Margallo anunció que viajará en los próximos días a Túnez y Egipto para buscar apoyos para "un plan de paz que debe materializarse en una conferencia internacional nueva, como fue Madrid 1991".