El Ministerio de Exteriores ha concluido un informe que analiza la situación en la que quedaría una Cataluña independiente a nivel internacional. La conclusión no es halagüeña a las pretensiones del actual presidente de la Generalitat, Artur Mas, quien sigue blandiendo la espada del derecho a decidir y, al menos, de puertas afuera, no renuncia a celebrar la consulta convocada para el próximo 9 de noviembre.
El informe, que consta de 12 páginas, advierte de que, de realizar una declaración unilateral de independencia, Cataluña quedaría en un "limbo jurídico", recoge El Mundo.
Bajo recomendaciones de la Organización de Naciones Unidas, los países no reconocerían a un estado surgido de otro de modo ilegal, ya que prima la integridad territorial y no el derecho a la secesión, que no está reconocido por ninguna Constitución.
Así, de optar Cataluña por la opción unilateral, no sería reconocida y dejaría de participar en la ONU, ni siquiera como país observador, según el informe.
Cataluña, ¿tras los pasos de Osetia del Sur?
Su situación podría equipararse entonces con la de otros territorios escindidos de este modo, como sucedió con Abjasia y Osetia del Sur.
El proceso para una integración de la hipotética Cataluña-estado en Naciones Unidas sería largo, del mismo modo que sucedería a la hora de solicitar un reingreso en la Unión Europea.
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