
El pasado mes de noviembre, la Consejería de Empleo de la Comunidad de Madrid abría un plazo ilegal para que las empresas afectadas por el escándalo del 'caso Aneri' (fraude de falsos cursos de formación de la Comunidad de Madrid para captar subvenciones) pudieran presentar la documentación tras descubrirse que la lista de alumnos era falsa.
Según el diario El Mundo, Jose Luis Aneri y el Departamento de Formación Continua llegaron a un acuerdo en octubre de 2013 para facilitar, de manera irregular y extemporánea, que las asociaciones afectadas -las que supuestamente recibían los cursos de José Luis Aneri- justificaran sus expedientes, ya que Sinergia -la empresa de Aneri- no los había justificado. De ser así (apertura de un plazo irregular- podríamos estar ante una presunta prevaricación por parte de la administración autonómica.
Antes de ser encarcelado por este fraude, Aneri recibía subvenciones de las asociaciones para dar cursos on-line a los empleados de esas entidades. A su vez, estas asociaciones obtenían ayuda de la Comunidad de Madrid, y a su vez ellas contrataban con Aneri, propietario de Sinergia. Sin embargo, éste no daba los cursos de formación.
Cruzar los datos de alumnos falsos
En junio del año pasado, Empleo inició varios requerimientos a Sinergia para que ésta justificara los cursos de formación. Tras recibir el silencio como respuesta, en octubre la Comunidad iniciaba un expediente de reintegro, y llamaba a los 30 presidentes de asociaciones para requerirles el dinero, ya que Sinergia, una vez más no contesta a Empleo.
Varias asociaciones, entre ellas cuatro de Fedecam, asociación empresarial presidida por Alfonso Tezanos (CEIM) -implicado directamente en el caso-, se dieron cuenta de la estafa al cruzar los datos. Fue entonces cuando los empresarios recomendaron a Empleo que cruzase los datos de los alumnos ante la sospecha de que había un fraude, ya que Aneri realizaba los cursos en poco más de dos semanas, y siempre a final de año cuando tenían 12 meses para realizarlos.
Ahora, la Comunidad de Madrid reclama 4,4 millones de euros por esta supuesta estafa de Aneri, acusado de defraudar 2,6 millones a 35 asociaciones empresariales a través de Sinergia Empresarial, la empresa matriz desde la que gestionaba un entramado de 15 compañías, con el objetivo de impartir cursos de formación a distancia y justificar facturas. En la actualidad, Aneri se encuentra en prisión provisional y sin fianza.