
El ministro del Interior, Jorge Fernández Díaz, ha tenido este miércoles a última hora de la mañana la oportunidad de saludar y agradecer personalmente su colaboración en el control de la presión migratoria sobre Ceuta a las primeras autoridades de las dependencias fronterizas marroquíes de Bab Sebta, hasta cuya entrada se ha acercado junto al delegado del Gobierno, Francisco Antonio González Pérez; el presidente del Ejecutivo local, Juan Vivas (PP); y los mandos de la Guardia Civil y la Policía Nacional en la ciudad autónoma.
El titular de Interior, que visita por primera vez Ceuta tras la tragedia que se cobró 15 muertos el pasado 6 de febrero en las inmediaciones del espigón marítimo fronterizo del Tarajal, ha llegado a la ciudad a mediodía. Acto seguido se ha dirigido al Palacio autonómico, donde se ha reunido junto a González Pérez con Vivas y parte de sus consejeros.
Después, todos han iniciado un recorrido por el perímetro fronterizo de Ceuta. La comitiva se ha detenido en la parte más alta del vial del servicio y junto a los polígonos comerciales del Tarajal, uno de los puntos en los que la madrugada del lunes al martes desembocaron cientos de personas sin documentación en otro intento de entrada colectivo que fue frenado por la Guardia Civil y las Fuerzas de Seguridad marroquíes.
La frontera de Tarajal
A continuación, Fernández Díaz ha llegado a la frontera del Tarajal, el único paso oficial habilitado para el tránsito entre Ceuta y Marruecos, cuyas dependencias ha recorrido brevemente antes y después de saludar a las autoridades marroquíes de Bab Sebta.
Un almuerzo de trabajo con los mandos de la Comandancia de la Guardia Civil encabezados por el teniente coronel Andrés López y, a primera hora de la tarde, otra reunión con los de la Jefatura Superior de la Policía Nacional, servirán de prólogo a su visita al Centro de Estancia Temporal de Inmigrantes (CETI), que actualmente acoge a 560 extranjeros con una capacidad máxima operativa fijada en 512 plazas.