
Los empresarios catalanes se van posicionando poco a poco respecto al proceso soberanista que vive Cataluña. Aunque es cierto que, oficialmente, las diferentes organizaciones patronales catalanas (Cámara de Comercio, Fomento de Trabajo, Pimec y Cecot) mantienen una cierta neutralidad, la presión que está ejerciendo el presidente de la Generalitat, Artur Mas, sobre los empresarios para que apoyen los argumentos independentistas está llevando a la polarización del mundo empresarial catalán.
Ayer en Barcelona, en un acto en la sede de Foment del Treball, el presidente de esta patronal, Joaquim Gay de Montellà, y el de la española CEOE, Juan Rosell, se declararon contrarios a implicarse en el proceso soberanista catalán, tal y como pidió la semana pasada el presidente catalán. El pasado viernes, Mas reclamó al empresariado que "no pase de la política" y se implique en la "conducción del proceso político" independentista, que "tenemos que hacer todos juntos", sostuvo.
Ante esta petición, ayer Rosell aseguró que "los empresarios no estamos para impulsar pactos políticos". Según indicó, "podemos ayudar a que se hable y poco más. Nosotros estamos para que las empresas funcionen y contraten. Esa es nuestra labor y nuestro objetivo".
El presidente de la CEOE considera que la situación política es compleja, pero "para eso están los políticos, que tienen mucho que hacer, los de aquí y los de Madrid". Según su análisis Cataluña tiene un problema político, social y económico "muy importante", que se ha ido "agravando" desde la sentencia del Tribunal Constitucional sobre el Estatut, pero cuya única solución es el "diálogo". "Habría que saber explicar al resto de España que hay un problema en Cataluña y hay que hablar para tratar de solucionarlo", indicó Rosell.
Sobre la voluntad real de diálogo que tienen Artur Mas y el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, considera que ambos, "a su manera", están tratando de encontrar estas vías de diálogo. Pese a ello, pidió un mayor esfuerzo a los partidos catalanes y españoles para garantizar la "tranquilidad" y la estabilidad política que quieren y necesitan los empresarios para ayudar a la recuperación de la economía española.
Por su parte, Joaquim Gay de Montellà defendió una vez más el "pacto fiscal" como solución para evitar el descontento que vive Cataluña y pidió a los partidos políticos que "no generen incertidumbre" y faciliten un escenario de estabilidad para que "todo el mundo se sienta cómodo". Aseguró que los empresarios continuarán trabajando para "generar riqueza y crear empleo" y que no se cansarán de reclamar "diálogo y negociación" a la clase política.
También la Cámara
En el mismo sentido se pronunció ayer el presidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, Miquel Valls, que considera que son los políticos los que deben dialogar para solventar la situación actual.
El presidente de la patronal Foment congregó ayer a los empresarios catalanes en una jornada de trabajo bajo el lema Anem per Feina (Pongámonos a trabajar). En su opinión, las empresas catalanas lo que necesitan para crecer y crear empleo es una mejora de las infraestructuras, una actuación decidida por parte de las diferentes administraciones contra la economía sumergida y una fiscalidad "más adecuada". Para Gay de Montellà, uno de los pilares de la recuperación es "la necesaria reforma fiscal que reduzca la presión sobre las empresas y familias".
Precisamente, la Generalitat tiene previsto anunciar este jueves día 20 la creación de Tributos de Cataluña, una nueva agencia tributaria que unifica las oficinas de recaudación de las cuatro diputaciones catalanas y que nace para ser el germen de una hacienda propia de una Cataluña independiente.
Ayer PSC, PP y Ciutadans criticaron este proyecto. La secretaria de Política Europea del PSC, Esther Niubó, aseguró que Mas no está "haciendo las cosas bien" y defendió una agencia tributaria consorciada con el Estado, que es "lo que establece el Estatut". Por su parte, la presidenta del PP, Alicia Sánchez-Camacho, anunció que recurrirá a la justicia si la Generalitat crea una hacienda independiente fuera del marco del Estatut. Finalmente, la portavoz de Ciutadans, Carina Mejías, denunció que CiU "pretende seguir creando impuestos con los que expoliar a los catalanes" que soportan una alta presión fiscal.