
Muchos de los políticos del panorama nacional que terminan sus legislaturas o se ven abocados a la dimisión son capaces de reubicarse con gran rapidez en grandes empresa o, incluso, en otros cargos públicos.
Los casos más sonados han sido los de los dos expresidentes del Gobierno, Felipe González (en Gas Natural Fenosa) y José María Aznar (en la Fundación FAES y Endesa), pero no son los únicos que han aprovechado sus contactos tras dejar su puesto. Estos son los recogidos por MSN noticias.
El último en aprovecharse de su anterior posición ha sido el exconsejero de Sanidad de la Comunidad de Madrid, Javier Fernández Lasquetty. El 27 de enero, tras el fracaso de la externalización de varios hospitales madrileños, decidió dejar su puesto. Tres días después le otorgaban una distinción por su labor en los servicios públicos y apenas unos días más tarde fue recolocado como presidente de la Comisión del Estatuto de Autonomía.
En ocasiones, los que sacan partido no son los propios políticos sino su gente de confianza. Al ministro del Interior, Jorge Fernández-Díaz, debió de causarle más de un dolor de cabeza su Director de Comunicación, Albert Gimeno. Éste emitió una nota de prensa y un tuit que anunciaban varias detenciones antes de iniciar la operación. Tras dimitir, Gimeno regresó al periódico La Vanguardia como redactor jefe adjunto.
El caso del escándalo de Ángel Carromero, acusado en Cuba de matar a los disidentes anticastristas Oswaldo Payá y Harold Cepero, tiene su toque de 'final feliz'. Ya en España, el Partido Popular -que aún presiona para que le den el indulto- le colocó como secretario general de Nuevas Generaciones.
Fraudes, accidentes y escándalos
De una polémica a otra: la de Irene Zoe Alameda, ex mujer del socialista Carlos Mulas. Con el pseudónimo Amy Martin, ella cobró miles de euros de la Fundación Ideas del PSOE hasta que en 2013 se descubrió la trama. La Fundación cerró y Mulas, director de Ideas hasta ese momento, dimitió,por lo que continuó su trayectoria en exclusiva en el FMI, donde había comenzado a trabajar dentro del Departamento de de Finanzas Públicas meses atrás.
El alcohol no hace distinciones y en ocasiones también les juega una mala pasada a los políticos. El pasado 24 de diciembre, la concejal del PP en Alcorcón, María Pilar Araque, atropelló a una anciana causándole graves heridas cuando conducía ebria. La edil de Participación, Servicios Sociales, Discapacidad, Inmigración y Cooperación conducía con 0,70 miligramos por litro de aire respirado, cuando el límite legal es de 0,25. De nuevo 'invitada' a dimitir, poco después fue reubicada en el Ayuntamiento de Madrid en un puesto de confianza con un sueldo de 6.000 euros mensuales, según denunció IU de Getafe.
Aunque sin duda, uno de los sucesos más sonados fue el de la concejal del PSOE en Los Yébenes (Toledo), Olvido Hormigos, al filtrarse un vídeo en el que aparecía masturbándose. Tras dimitir, en este caso la edil decidió pasar a formas parte de los 'realities' televisivos y hoy, no es díficl encontrarla en la prensa del corazón.