Las encuestas así lo aseguran: la llegada de Izquierda Unida al Gobierno podría ser una realidad a partir de 2015. Los de Cayo Lara están recogiendo, junto a UPyD, los votos de PP y PSOE y están canalizando el descontento de la ciudadanía. De hecho, una encuesta en El Periódico de Catalunya les otorga entre 37 y 39 escaños y con ello la posibilidad de entrar en el gabinete.
La posibilidad para IU reside en un pacto con el PSOE. Y, tal y como publica El Mundo, esta alternativa estaría empezando a ser muy tenida en cuenta por los dirigentes del partido. Por esto, la organización se está poniendo en marcha para prepararse de cara a su primera participación en el Ejecutivo español.
Con la economía como eje central de la estrategia de todos los partidos, IU se esfuerza por dar mayor entidad a sus propuestas económicas para afianzar su capacidad de gobernar. El objetivo es concretar aún más unas propuestas que, insisten, ya estaban formuladas pero estaban planteadas de forma "generalista" y carecían de "cultura de gobierno". La idea, aseguran, es conformar "un proyecto sólido, riguroso y coherente con nuestro pensamiento".
En este sentido, con su hipotética llega al poder, el partido de Cayo Lara querría tumbar las políticas del equipo de Mariano Rajoy (acabar con las privatizaciones y mejorar la gestión de los servicios públicos) y dar un paso más planteando nuevos modelos de educación o sanidad.
El hecho de que ciertas ideas que hace unos años estaban destinadas al ostracismo, como la de una banca pública, estén tomando cada vez más relevancia, es visto en IU como un síntoma de que ha llegado su hora.
Campaña anti-bipartidismo
En paralelo, IU va a poner mayor énfasis en reforzar su postura contra el bipartidismo de PP y PSOE. De hecho, en las próximas semanas va a lanzar una campaña "contra la reconstrucción del bipartidismo monárquico". El objetivo de IU, además de acabar con el duopolio de populares y socialistas, es concienciar a la población sobre la necesidad de cambiar el sistema.
Entre otras medidas, quiere que los programas electorales sean de obligado cumplimiento: para ello luchará por que las medidas anunciadas sean vinculantes y que su no cumplimiento signifique la convocatoria de elecciones.
Puerta abierta a una coalición PSOE-IU
