
Magdalena Álvarez, exconsejera de Hacienda de la Junta de 1994 a 2004, volvió a declarar ayer ante la juez Mercedes Alaya que instruye el caso de los ERE fraudulentos de Andalucía.
La hoy vicepresidente del Banco Europeo de Inversiones, que recurrió su imputación y por ello ha sido de nuevo llamada a declarar tras rechazarse parcialmente ese recurso, volvió a echar balones fuera como hizo en su primera comparecencia en octubre pasado.
Si el mes pasado aseguró que desconocía el destino de las modificaciones presupuestarias que ella aprobó entre 2000 y 2003 por 125 millones, que sirvieron para alimentar el fondo de reptiles para los ERE, ayer descargó toda la responsabilidad de la creación y gestión de la partida presupuestaria 31.L -el fondo de reptiles- en la Cnsejería de Empleo.
Pese a que Alaya le preguntó si no es Hacienda quien elabora el presupuesto según la legislación andaluza, Álvarez señaló que la planificación que llega de cada consejería se incorpora a las cuentas "sin modificar absolutamente nada", aseguró.