
El eurodiputado del PP Alejo Vidal-Quadras ha ido más allá en su explicación sobre la necesidad de sacrificar la cabeza de Rajoy para salvar España, y hace extensible esta idea a toda la cúpula popular. "Que tú andes estando muerto y no te hayas dado cuenta no quiere decir que no estés muerto. No tienen salvación, pero no lo quieren reconocer", critica.
Su razonamiento acerca de que "la dirección actual, es un equipo incinerado" pivota sobre tres fallos, a juicio de Vidal-Quadras, "decepcionantes". Falta de diligencia, manga ancha con ETA y la 'lacra' de su extesorero, Luis Bárcenas.
Así lo reconocía el eurodiputado en Intereconomía. "Reforman tarde, de manera incompleta, no afronta el problema fundamental del país -disminuir el gasto estructural del Estado sin subir los impuestos a empresarios y particulares- y es benevolente con ETA. Sólo faltaba el caso del extesorero, que clava sucesivos clavos en el féretro electoral del PP", explicó.
Vidal-Quadras hace un llamamiento al cambio para poner punto y final a "una inercia fúnebre", que es la pérdida de poder político de los dos grandes partidos, con un crecimiento grande de la extrema izquierda, los nacionalistas más beligerantes que nunca" y la presencia de los "filoetarras".
La transformación que reivindica Vidal-Quadras pasa por dejar atrás el pasado y contar con aquella "gente del PP bien preparada, con experiencia, con un proyecto serio, no para administrar el día a día de manera semiautomática, como hace ahora, sino para reformar este sistema, que está colapsado".