El presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, se incorpora al trabajo este lunes con un importante proyecto bajo el brazo: la reforma del Código Penal, que entre otras medidas, endurecerá las penas para toda actividad relacionada con la corrupción.
El 'caso Bárcenas', que ha afectado seriamente a la imagen del PP ante la opinión pública, y otros casos de corrupción que se están viendo en los tribunales a lo largo de este año y que implican a distintos partidos o figuras políticas (veáse 'Gürtel', los ERE de Andalucía, el 'caso Campeón' en Galicia, el 'caso Pallerols' que afecta a Unió o el de la concesión de las ITV de CiU), han puesto al actual Gobierno un listón muy alto para crear nuevos aires y recuperar la confianza del ciudadano en la política.
Así, entre otras medidas, el presidente Mariano Rajoy propondrá al PSOE y a otros grupos de la oposición la tipificación de la financiación ilegal de los partidos políticos como delito, cosa que hasta ahora no existía, según relata el diario El País.
En casos demostrados de financiación ilegal, solo se imponía una multa a la formación que había incurrido en la falta.
Mientras que otras medidas ya están decididas y su incorporación en el proyecto de reforma del Código Penal es firme, esta última la deja el jefe del Ejecutivo relegada a la negociación con los partidos opositores, por lo que queda ahora ver si Rubalcaba recogerá el guante y aceptará una propuesta que trata de devolver la calma a los ciudadanos.
Al menos, para el futuro, ya que, de ser aprobado e introducido en el Código Penal, el nuevo delito tipificado no funciona de forma retroactiva, por lo que no afectará a los procesos abiertos. Entre ellos, el que afecta al Partido Popular, el 'caso Bárcenas'.
Los otros cambios que se incorporarán en relación a los delitos de corrupción serán, entre otros, la luz verde para sancionar gestión desleal de patrimonio de terceros, se endurecerá la pena para el cohecho y para la malversación de fondos públicos.
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