Un mes y medio después de la controvertida entrevista a José María Aznar en una cadena de televisión, en la que el expresidente del Gobierno se mostró muy crítico con la gestión económica y política que estaba llevando a cabo Mariano Rajoy, ambos tendrán la oportunidad de encontrarse cara a cara. Será este domingo, en la clausura del campus FAES, que se ha desarrollado desde el pasado 1 de julio.
Aunque hace unas semanas se intentó cerrar la polémica con la asistencia de la vicepresidenta Soraya Sáenz de Santamaría y el ministro Soria a la conferencia que pronunció el expresidente en el Club Siglo XXI, los focos estarán puestos este domingo en la 'foto' entre Aznar y Rajoy, quien no ha roto con la tradición de ediciones anteriores de clausurar los cursos.
La estrategia confusa de Aznar
Tras la polémica entrevista, José María Aznar ha desarrollado una estrategia confusa. Por una parte, su presencia se ha multiplicado en distintos actos desde su intervención en televisión: presentó un libro editado por FAES en el Congreso de los Diputados, pronunció una conferencia en el Club Siglo XXI, y ha inaugurado el campus FAES. Sin embargo, no ha utilizado la atención de las cámaras para continuar con ataques a Rajoy. Al menos, no con la misma dureza.
Por el contrario, el día de apertura de los cursos de la fundación que preside Aznar, cambió su tradicional discurso de bienvenida y cedió el testigo a la secretaria general del PP, María Dolores de Cospedal, presente también en la cita. Mientras que el expresidente optó por el silencio hace una semana, Cospedal lanzó un significativo mensaje en su elocución, en la instó a "diferenciar la vieja política de la nueva política y sobre todo, saber dónde estamos". El encuentro entre ambos líderes políticos fue frío.
Solo un día después de esta voluntariosa cesión de protagonismo y demostración de conciliación por parte de Aznar, el presidente de honor del Partido Popular presentó un informe que le dio pie a volver a pedir una bajada de impuestos (una de las medidas del programa electoral del partido incumplidas por el presidente Mariano Rajoy).
El expresidente defendió una reforma fiscal presentada por su fundación. Según explicó, la idea de la reforma es suya, pero el trabajo es de otros, ya que fue coordinada por el presidente de la Comisión de Hacienda y Administraciones Públicas del Congreso de los Diputados, Gabriel Elorriaga, entre otros. En el documento se afirma que "cualquier paso que se dé hacia impuestos más reducidos y hacia bases imponibles más amplias es un paso en la buena dirección."
El tono de Aznar, sin embargo, no ha traído al recuerdo la dureza de sus declaraciones en televisión, que fueron contestadas por el PP con desinterés e indiferencia. Mariano Rajoy habría dado entonces la orden a sus ministros y a altos mandos del partido de ignorar estas declaraciones y de no entrar en un conflicto abierto y público con el expresidente.
¿Qué pasará este domingo?
Según ha informado la fundación organizadora del campus veraniego a EcoDiario.es, este domingo tampoco está previsto que José María Aznar pronuncie ningunas palabras, salvo una breve intervención en la que dé paso a Mariano Rajoy, cuyo discurso se anuncia a las 12 de la mañana. Sin embargo, este encuentro en persona entre ambos mandatarios resulta muy simbólico por las profundas diferencias que quedaron patentes hace un mes y medio.
El expresidente aseguró que no habían mantenido más que una conversación desde el inicio de la legislatura, y sus palabras entrevieron una relación que ha dejado de ser estrecha.
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Aznar vuelve al ataque