"Nos encontramos ante un final de ciclo e ignorarlo sería una irresponsabilidad". Esa es la tesis que defiende el Círculo de Economía. Ayer su presidente, Josep Piqué, pidió a los partidos políticos mayoritarios en España (PP y PSOE) y en Cataluña (CiU y PSC) que sean conscientes de la situación y que acepten una reforma de la Constitución antes de que nuevas fuerzas políticas cobren protagonismo y les arrebaten la representación parlamentaria.
La junta del Círculo de Economía, donde están representados los grandes empresarios catalanes, emitió ayer una hoja de opinión en la que asegura que el ciclo de 35 años que se inició con la Transición está llegando a su fin, ya que las nuevas generaciones que no vivieron ese momento histórico ya no se sienten representadas.
"Puede pasar que la mayoría de ciudadanos no se sientan representados en una Constitución que no sienten como propia, lo que puede llevar a periodos convulsos. Por eso, desde el Círculo pedimos que los poderes públicos se anticipen", argumentó Piqué.
Ante esta falta de representatividad, Piqué aseguró que es necesaria una reforma de la Constitución en la que se modifiquen el Senado, el sistema de justicia, los partidos políticos, las listas electorales cerradas y la monarquía. "Hay que repensarlo todo para evitar que nuestra Constitución acabe como todas las constituciones españolas desde la de Cádiz en 1812: derogadas de forma traumática", sentenció.
"Las estructuras políticas están anquilosadas y ya no representan a los ciudadanos", afirmó y eso se refleja en las encuestas electorales donde los partidos tradicionales sumados ya no alcanzan el 50% de sus parlamentos.
Fallan las autonomías
"Tampoco el sistema de autonomías ha conseguido contentar a los ciudadanos, ya que unos piden la recentralización y otros reclaman mayor capacidad de gestión, lo que demuestra que ya no funciona", explicó Piqué. Otra petición es la reforma del sistema de financiación de las administraciones públicas, más justo y prestando atención a los ayuntamientos, los grandes perjudicados con el reparto actual.
El Círculo considera que la crisis económica afecta a la ciudadanía porque desanima, desmoraliza y hace perder la confianza en los poderes públicos, a lo que se suma los casos de corrupción política que aparecen.
"Es una opinión muy extendida que la clase política española es generalizadamente corrupta o que la corrupción es fundamentalmente política", señaló.
Aunque mostró su desacuerdo con estas afirmaciones, aseguró que "en cualquier caso, los problemas están ahí. No querer verlos no nos conduce a nada y lo que hay que hacer es hablar con voluntad para que los ciudadanos se sientan representados en las instituciones y las diferentes administraciones", añadió.
Reforma de la Monarquía
El presidente del Círculo también considera que la Monarquía es una de las instituciones que deberían reformarse para que la ciudadanía se identifique con ella. "La Constitución prevé el desarrollo de determinadas leyes sobre la Monarquía y no se ha creído oportuno hacerlo, pero es bueno que se plantee ahora para reforzar la institución".
Piqué hizo autocrítica y aseguró que "se han cometido muchos excesos, comportamientos especulativos y enormes desequilibrios" que ahora se deben digerir. En su opinión, el final de ciclo se debe a la especulación que ha deslegitimado a los agentes económicos, una estructura de representación política anquilosada, instituciones públicas cada vez más cuestionadas y una sociedad civil desorientada y complaciente.
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