
No sólo el presidente del Gobierno, Mariano Rajoy, evita el contacto con los periodistas plasma mediante. Alfredo Pérez Rubalcaba también ha utilizado esta modalidad de comparecencia tan criticada por los medios de comunicación y por su propio partido en varias ocasiones. La última vez, este domingo tras la reunión con su equipo para exponer un Plan de Reactivación Económica, evitando de este modo las preguntas de los periodistas.
El pasado dos de abril, el líder socialista, también optó por no rendir cuentas a los periodistas el día en que celebró un encuentro coloquio con los jóvenes en la madrileña sede de Ferraz. Sólo una parte de su intervención se emitió por televisión en el salón de prensa.
Críticas de su propio partido
A pesar de la evidencia, varios altos cargos socialistas se han dedicado en las últimas semanas a criticar este tipo de prácticas de comunicación. La 'dos' de los socialistas Elena Valenciano ha reiterado varias veces que el "PSOE viene aquí a explicarles a ustedes en qué estamos, en este gran proyecto reformista, y tienen también un PP que con suerte pueden ver a través de una televisión de plasma", en referencia a los discursos televisados del presidente del Gobierno.
Tras conocerse el último dato de desempleo de la EPA, Valenciano aprovechó también para ironizar con el tema. "Ya han reconocido que no lograrán combatir las cifras (que no son cifras, ¡son personas!) del desempleo. Si van a tirar la toalla, que avisen, aunque sea desde el plasma", concluye.
Asimismo el secretario de Organización del PSOE, Óscar López, en rueda de prensa el 19 de abril criticaba a Mariano Rajoy, por "esconderse tras una televisión de plasma" y no da explicaciones sobre las finanzas de su partido e insistía "que alguien dé la cara y asuma responsabilidades".
Al contrario que los socialistas el PP, no se esconde en justificar las tan criticadas comparecencias de su líder. El vicesecretario de Estudios y Programas del Partido Popular, Esteban González Pons, alude al carácter privado de las reuniones para sostener la política de comunicación del plasma, "siempre ha sido así", insiste.