Rotundamente no. La Casa Real no ha valorado en ningún momento trasladar al Rey de la Clínica La Milagrosa tras la explosión que ha tenido lugar en el cuarto de calderas del centro hospitalario a primera hora de la mañana. "Nada se deja a la improvisación -explica la Policía-. Si se hubiera tenido que evacuar al Rey en algún momento, se hubiera hecho sin problema". El Rey evoluciona de forma satisfactoria.
El accidente de La Milagrosa "no ha afectado para nada" la permanencia del Rey en el recinto hospitalario. El suceso ha tenido lugar en la parte opuesta en la que se alojaba el monarca, de manera que "ni se ha oído nada ni se ha notado la onda expansiva", aclara Zarzuela a EcoDiario.es.
La seguridad en el punto de mira
Los problemas de seguridad, cuestionados a primera hora de la mañana por las características de la ubicación de la clínica y sus accesos, eran disipados a mediodía por la delegada del Gobierno, Cristina Cifuentes, quien en declaraciones a los medios desmentía que en en algún momento se hubiera sopesado trasladar a Don Juan Carlos o a otros enfermos, a otros centros hospitalarios. La Casa Real también insistía en este aspecto.
Expertos en seguridad han defendido para la ocasión las medidas aplicadas por Zarzuela. "Cuando se monta un plan de seguridad para el rey, nada se deja al azar. Es un tema prioritario. Si esta mañana se hubiera tenido que evacuar en algún momento al monarca, no habría habido ningún problema", mantiene la fuente consultada. "Nada, absolutamente nada se deja a la improvisación", remarca.
Agentes, acordonamiento...
El operativo de seguridad del Rey de España depende de la Casa Real, hoy en manos del coronel de la Guardia Civil, Francisco López Requena. El dispositivo de ahora ha desplegado medidas extremas que -tal y como recuerda elconfindencialdigital-, pasan, entre otras acciones, por más de una docena de agentes, repartidos en cada esquina, en las calles -ocupa una manzana el edificio-, y el resto en los accesos de vehículos que son sistemáticamente registrados. Además, está prohibido el estancionamiento en parte de la zona acordonada.
Tras el suceso, entrevistas formuladas a las puertas de La Clínica La Milagrosa subrayaban la normalidad con la que el centro ha abordado el incidente producido en el cuarto de calderas poco antes de las ocho de la mañana. A tenor de sus respuetas, apenas se han percatado del olor, y por otra parte distinguen la profesionalidad del cirujano Manuel de La Torre y la "humildad del rey" por haber elegido "un centro como éste que es de lo más normal", indicaba una de las personas entrevistadas.