Hasta 4.000 firmas en menos de 24 horas. Fueron las que se recogieron desde el miércoles hasta ayer en una página web, después de que el presidente de la Comunidad de Madrid, Ignacio González, reconociese la propiedad de un ático en Marbella -relacionado con la trama Gürtel-, tras negarlo previamente en numerosas ocasiones.
De esta manera, la ciudadanía trató de demostrar la oposición al mandatario madrileño, al que acusan "de mentir" sobre sus posesiones. "Si no podemos fiarnos de su palabra en un asunto tan sencillo, cómo lo vamos a hacer para que administre la Sanidad, la Educación o los transportes", aseguraba el creador de la iniciativa.
Pero González también tiene apoyos. El primero llegó del número dos de la Comunidad y portavoz, Salvador Victoria, que rechazó las dudas concernientes al ático en el que veranea el presidente de la Comunidad. "Las sospechas son un montaje del Sindicato Unificado de Policía", recordó Victoria. "No existe ninguna investigación judicial" al presidente regional, insistió.
El Ejecutivo madrileño defiende a su líder por las "muestras que ha dado de transparencia y de información", poniendo como ejemplos que mostrara facturas de pago del inmueble o que acreditase las transferencias al propietario del ático, la compañía Coast Inversors que representa Rudy Valner.
El otro gran apoyo llegó por parte de su mentora y predecesora, la expresidenta Esperanza Aguirre. La actual presidenta del PP de Madrid puso "la mano en el fuego" por el que fuera su número dos, ya que ha explicado todo lo relativo al piso marbellí "perfectamente". "Me enseñaba como pagaba el alquiler, no mintió", aseguró Aguirre.
La exmandataria madrileña explicó que la compra del piso se ha realizado gracias a la indemnización cobrada por la mujer de González, Lourdes Cavero, actual vicepresidenta del CEIM, que sufrió un ERE de Unesa.
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Ignacio González admite la compra