
Artur Mas se siente cómodo entre dos aguas. De un lado aviva la llama del soberanismo pero de otro su compromiso independentista no acaba de cuajar. Ésta es la impresión que Salvador Sostres tiene del presidente de la Generalitat, a quien compara con "las chicas cuyo morbo consiste en hacerse la estrecha".
Las promesas de soberanía fiscal y de estructuras de Estado "solo sirven para sacar tajada electoral". Detrás de esos sentimientos, expresados en el día de la Diada el 11 de septiembre, radica una falta "sinceridad" que se refleja en el hecho de que "Mas no nombra ni una sola vez la palabra independencia e incluso haya llegado asegurar que sus objetivos políticos no implican romper con España", explica Sostres en El Mundo.
El columnista también carga con el recién nombrado candidato socialista a la Generalitat de Cataluña, Pere Navarro, quien se erige como defensor del federalismo contra la deriva independentista de CiU. Una postura política, que es entendida por Sostres, como un intento por "salvar los muebles".
Además, el colaborador de El Mundo acusa al PSC de "engañar a los catalanes" con su intento de llevar al Congreso la reforma de la Constitución para modificar el sistema de Estado autonómico, después del "escarmiento y del fracaso colectivo" que supuso la reforma del Estatut. Sostres les aconseja estar alerta sobre las consecuencias nefastas de cualquier cambio de estatus de Cataluña.
En definitiva, el periodista catalán tilda a la clase política de su comunidad de "mediocre, cobarde y mentirosa". Y vaticina como Mas reculará y se esconderá en la ambigüedad a medida que va llegando el momento de hacerse responsable de cada proclama, como ya empieza hacer.