
El alcalde de Marilaneda, Juan Manuel Sánchez Gordillo, saltó a la fama mundial el pasado mes de agosto cuando apoyó el asalto de un supermercado para repartir la comida robada entre gente con problemas económicos. No ha sido su único 'coqueteo' tenso con estos establecimientos. Durante la huelga del pasado 29 de marzo, Sánchez Gordillo formó parte de los piquetes informativos que coaccionaron al dueño de unos establecimientos para cerrarlo y cumplir con la convocatoria de los sindicatos.
Así lo demuestra un vídeo difundido por diario El Mundo en el que se puede ver a Sánchez Gordillo amenazar al gerente de un 'Día' en la localidad de Estepa, Sevilla.
"Yo te voy a hablar claro. Si ustedes no nos hacéis caso y ahora cerráis y dentro de media hora tenemos que venir otra vez, mañana, pasado, el otro... podemos venir 500 y hacer lo que pensamos hacer. Y es que tiramos todo lo que hay ahí... No nos llevamos nada, pero te tiramos todo al suelo y vas a tener que poner a trabajar durante veinte días a la gente", le comenta tal y como recogen las imágenes.
El empleado mantiene entonces un diálogo con él, pero no logra hacerle desistir de su actitud. Sánchez Gordillo sale entonces del recinto e informa a los presentes alentándolos a visitar la tienda días después para comprar pese a no tener dinero; esto es, les invita a entrar y robar parte de la comida.
Otro sindicalista, Antonio Pineda, de CCOO, entra también en escena en el vídeo cuando charla con el mismo empleado y le ratifica la intención de llevarse comida sin pagarla, eso sí, manteniendo una estrategia que impida que los posibles asaltantes sean detenidos por un delito de robo mayor.
"El que quiera comprar, a comprar. Y, cuidado, menos de 300 euros, ¿eh?, que a partir de 300 te pueden meter en le cárcel, con 300 euros no", grita desde la puerta del recinto.