El asalto de Juan Manuel Sánchez Gordillo (IU) a dos supermercados andaluces ha dado la vuelta al mundo. Ahora su repercusión alcanza tanto a países de nuestro entorno como a otros tan lejanos como China o Estados Unidos. Para unos es un Robin Hood para otros simplemente pone en riesgo las difíciles decisiones del Gobierno.
Tanto el Daily Mail como la agencia Reuters, incluso el China Daily, destacan cómo Sánchez Gordillo se ha convertido en un héroe de culto tras sus robos en supermercados para dar los productos robados a los pobres. Aunque también comentan los problemas que puede acarrear este comportamiento para el Gobierno de Rajoy, ya que da alas a los descontentos por los recortes.
Por su parte, The Guardian repasa la trayectoria de Marinaleda y su alcalde, de la utopía en la que viven, sin policías y con supuesto pleno empleo. Pero también comenta cómo consiguieron, a las puertas de la sevillana Expo'92, que el Gobierno andaluz expropiara 1.200 hectáreas de tierras para cedérselas a este pueblo de 2.600 habitantes tras ocupar los aeropuertos andaluces y de múltiples manifestaciones. Sánchez Gordillo, desde luego, sabe aprovechar el momento.
Los artículos, reflejo de la situación española, van acompañados de comentarios en los que se critica la actitud de este personaje oportunista que defiende su visión comunista actuando contra empresas que, al fin y al cabo, dan empleo a miles de trabajadores. En cualquier caso, también hay muestras de apoyo porque la gente se muestra comprensiva con la difícil situación que vivimos en nuestro país.
El New York Times se hacía eco de la situación española y de la opinión de Sánchez Gordillo ya en el año 2009 con dos artículos. Desde el periódico neoyorkino se ofrecía también el punto de vista de ciertos vecinos descontentos con la gestión. Según ellos, el mayor propietario de tierras en Marinaleda es el alcalde.
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La marcha de Sánchez Gordillo