Esteban González Pons declarará en las próximas semanas en calidad de testigo en la pieza número 25 del caso Palma Arena, la centrada en las actividades de Nóos. Para ello el juez José Castro se desplazará a la capital con la intención de esclarecer las irregularidades en los pagos que Pons firmó con Iñaki Urdangarin para organizar los Juegos Europeos por valor de cinco millones de euros.
Según los documento intervenidos por la Policía Judicial y la Fiscalía anticorrupción esto ocurrió cuando Pons era conseller de Presidencia de Francisco Camps. La firma se hizo con una empresa, propiedad del duque de Palma, que se había constituido 11 días antes. Pese al contrato millonario, Urdangarin no logró que Valencia fuese la sede de los Juegos Olímpicos Europeos. Eso no le impidió a Urdangarin percibir 382.000 euros públicos por los servicios prestados.
Según el juez Castro los políticos del PP deberían haber respetado el convenio y no asignar a dedo los fondos públicos al marido de la Infanta Cristina.
El magistrado, a partir de esta declaración, decidirá si imputar al expresidente valenciano Francisco Camps ya que el propio González Pons afirmó que la idea de contratar al marido de la Infanta Elena "fue de Camps" y que los fondos públicos que le fueron abonados al Instituto Nóos de Urdangarin, "los dispuso Víctor Campos, ex vicepresidente de la Generalitat valenciana".
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