
Este lunes salía de la cárcel madrileña de Soto del Real el presunto el presunto cabecilla de la 'trama Gürtel'. Tras pasar por la Audiencia Nacional para entregar su pasaporte, Francisco Correa ha reaparecido hoy en los juzgados de San Roque (Cádiz), donde debe acudir a diario.
Ante la posibilidad de que realizase una fuga de capitales al extranjero o interfiriese el curso de la investigación, el juez que instruía el caso en 2009, Baltasar Garzón, ordenó su prisión preventiva. Después de pasar algo más de tres años recluido, ha sido puesto en libertad después de que su fianza haya sido reducida a 200.000 euros.
A su llegada a los juzgados de San Roque, vestido de sport con un polo gris de manga corta, pantalones color crema y unos náuticos sin calcetines, Correa ha reconocido que se encuentra en su chalet de Sotogrande junto a su mujer y a su hija.
El principal acusado de la trama tiene la obligación de comparecer diariamente en el juzgado más próximo a su domicilio. A pesar de haber sido puesto en libertad, Correa tiene terminantemente prohibido abandonar España -entregó su pasaporte en la Audiencia Nacional el pasado martes- y sigue imputado por los delitos de cohecho, tráfico de influencias, fraude fiscal, asociación ilícita, blanqueo de capitales y falsedad documental.