Los diputados tendrán el sueldo congelado también este año, después de que la Mesa del Congreso de los Diputados diera el visto bueno ayer a los Presupuestos de 2012, que contemplan una reducción del 5,2 por ciento.
Sus cuentas pasan de los 91,7 millones de euros del año pasado a los 86,9 millones -casi 5 millones menos- y se sitúan en los niveles de 2006.
Se trataría, por tanto, del tercer año en el que se rebajaría el gasto de la Cámara y del quinto ejercicio en el que las retribuciones de los parlamentarios se ven afectadas, después de las congelaciones de 2008 y 2009, del recorte de 2010 y de la congelación de 2011.
Las partidas más tocadas
Casi tres millones del ajuste llegarán por el recorte de partidas como la atención protocolaria y representativa, que se verá reducida un 45,7 por ciento, de los viajes, cuyo presupuesto caerá un 14,5 por ciento o de reducción de material o transportes. Además, la Cámara se ahorrará 1,7 millones por la decisión de suprimir su aportación al plan privado de pensiones creado para diputados y funcionarios.
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