
Los documentos recogidos por la Policía Judicial y la Fiscalía Anticorrupción atestiguan que Iñaki Urdangarin era el cabecilla de la trama Nóos y que era él en persona el que se aseguraba de dar la cara por la empresa.
Urdagarin dirigía en persona la trama Nóos. Él era quien presidía la ONG sin ánimo de lucro y quien lograba los contratos millonarios con la Administración. Como se sabe, el duque de Palma es el presunto maquinador de una gran trama de corrupción empresarial.
El yerno del Rey participó de forma activa en la captación de fondos, según las diligencias judiciales. El duque de Palma no sólo se reunión el expresidente de balear Jaume Matas y altos cargos del Ejecutivo autonómico para cerrar acuerdos, sino que también visitó en persona a los directivo de entidades financieras para que donaran fondos a sus proyectos. Según El Periódico así fue, al menos, con la caja Sa Nostra. Un miembro de esta entidad ha relatado cómo se reunió Urdangarin con su presidente y le pidió dinero.
Tal fue el afán de Urdangarin a la hora de asumir el control de los negocios de su entidad que llegó a usar el palacio de Marivent, residencia oficial de los Reyes en Palma. Ahí cerró un acuerdo de 18 millones de euros para patrocinar a un equipo ciclista.