
El enviado de Naciones Unidas y la Liga Árabe para Siria, Kofi Annan, ha asegurado que el Gobierno sirio le ha confirmado que cesará toda violencia conforme al calendario propuesto en el plan de paz, que contempla un alto el fuego a partir de mañana, jueves.
Sin embargo, Damasco también le ha transmitido que se reserva el derecho a responder ante cualquier agresión.
Siguen los ataques
Las tropas del régimen sirio atacaron la mañana del miércoles varios barrios de la ciudad de Homs horas después de que Presidente Bashar Al Assad asegurase a las Naciones Unidas que respetarían un alto el fuego con los rebeldes.
Annan aseguraba este miércoles que ha recibido "garantías" del Gobierno sirio de que respetará el alto el fuego, a menos de 24 horas de que venza el plazo para el cese de las hostilidades con las fuerzas rebeldes.
"He recibido garantías del Gobierno de que respetará el alto el fuego", declaró Annan durante una visita oficial a Teherán para recabar apoyos a su plan de paz. "Si todo el mundo lo respeta, creo que a las seis de la mañana del jueves las condiciones sobre el terreno habrán mejorado", añadió.
Graves consecuencias
Asimismo, durante una rueda de prensa celebrada en Teherán, y televisada en directo, Annan ha advertido de que la militarización del conflicto en Siria sería desastrosa y tendría consecuencias "inimaginables" y ha destacado la importancia de que los Gobiernos de la región se impliquen en la crisis siria, en particular el de Irán, que podría "ser parte de la solución".
En la misma rueda de prensa, el ministro iraní de Asuntos Exteriores, Ali Akbar Salehi, declaró que "se debe dar la oportunidad al Gobierno de Siria de llevar a cambio cambios bajo el liderazgo de Bashar Al Assad".
Según Salehi, el pueblo sirio debe poder disfrutar de derechos democráticos, como la pluralidad de partidos políticos y la libertad de eleccion. "No obstante, también hemos advertido de que nos oponemos a las interferencias en los asuntos de todos los países, incluida Siria", aseveró.