Noam Shalitl, el padre del soldado hebreo Gilad Shalit que fue capturado en junio de 2006 por milicianos próximos al Movimiento para la Resistencia Islámica (Hamás), se reunió ayer con el primer ministro israelí, Benjamin Netanyahu, y les pidió que avancen en las negociaciones para la liberación de su hijo.
En el segundo encuentro desde que Netanyahu asumiese como 'premier' israelí, los miembros del Gobierno informaron a Natan que no ha habido progreso en las conversaciones, tal y como lo indicó la familia del soldado de las Fuerzas de Defensa Israelíes en un comunicado recogido por el diario 'Jerusalem Post'.
Noam aprovechó el encuentro para pedir al primer ministro que nombre un cargo que se ocupe personalmente del caso de Shalit y que se esfuerzo al máximo para conseguir que finalmente Hamás acceda a las peticiones del Gobierno israelí y muestren indicios de que su hijo todavía sigue vivo.